Otro de los puntos más atractivos para el público que disfruta de las actividades extra-foros del Congreso de Cultura es la plaza seca del Amadeo Conte-Grand. A un pasito del café, siempre concurrido, dos polos artísticos atraen a grandes y chicos: Formando Encuentros y el Cirko Marisko.
Cobijados por una carpa blanca de puertas abiertas, muy dispuestas a recibir a quienes quieran echar un vistazo, están los artistas plásticos locales que participan de Formando Encuentros. Se trata de una de las propuestas culturales a través de las cuales, pintores y escultores trabajan sus obras en vivo.
Ataviada con overol y antiparras protectoras, y con motosierra en mano, fuera del stand Alcira Navarrini va dando forma a su trozo de quebracho blanco, que hoy ya estará listo para el barnizado. "Es una escultura de un cóndor, aunque bastante abstracta", dice la artista que, como sus colegas, por la mañana y por la tarde mudan su taller a la plaza.
Tanto público ocasional como los mismos participantes del Congreso que transitan por el complejo se detienen a observar y también a preguntar, por ejemplo, qué es lo que arma el reconocido Pepe Vilanova con secciones de madera de bordalesas de vino viejas. "Es un trabajo abstracto, repetición de unidades", dirá en pleno proceso.
A su lado, Karla Mena se concentra en un ensamblado. Sus manos van moldeando la cerámica que se convertirá en un homenaje a los mineros chilenos atrapados luego del derrumbe de la mina. Y mientras tanto, Luis Fernández sigue agregando detalles a su mural de arcilla, una sucesión de rostros que desembocará en una suerte de crisol de razas, como explica.
Picadero urbano
Pocos pueden sustraerse al encanto de Don Pascual, con sus humoradas camperas, este viejito deambula entre los invitados al show, dialogando con ellos y también con los artistas que -en un desnivel que sirve de escenario y donde también se alza un retablo- cantan, bailan y actúan para el público. En realidad, como buen títere de tamaño natural que es (manejado por uno de los muchachos que, excelente en lo suyo, pasa casi desapercibido, pese a estar a la vista), él también es parte de esta troupe que llegó de Buenos Aires a San Juan. Son los integrantes del Cirko Marisko, célebres habitués de la porteña Plaza Francia, que ahora hacen de las suyas en la Plaza Seca y cuya última actuación será hoy desde las 17. Luego que un grupo de "payasos didácticos" pone en clima a la platea enseñándole globología, haciendo títeres y concursos; aparecen Martín Kong (en el bajo), Lucas Crazy Waves (street dance), Choz (break dance) y Boro (guitarrista), quienes -a partir de canciones, juegos y fuerte interacción con el público- arrancan risas de chicos y grandes, con su manera lúdica de hacer cultura.