Hace 10 días atrás, la decisión del cuerpo técnico de Sportivo Del Bono fue prescindir de los servicios del delantero mendocino Lucas Galán, quien había llegado en el receso estival a mediados de enero como refuerzo. Hasta ahí, el tema parecía estrictamente vinculado a una cuestión futbolística y no escapaba a las generales de la ley del ambiente del fútbol. Pero ayer la situación tomó otros ribetes porque Galán fue desalojado del hotel donde vivía y además de tener que regresar a Mendoza casi a la fuerza, se marchó sin las respuestas que esperaba desde la dirigencia que no le pagó los dos meses de sueldo que le adeudan. Dolido aún, sorprendido al extremo, Lucas abordó el tema con cierta incomodidad: "No lo puedo creer. Hace 10 días decidieron que se terminaba mi relación con Del Bono y durante todo este tiempo lo único que hice fue llamar y llamar para ver cuando me pagaban. No encontré respuestas de ningún tipo. Sabía que era cuestión de paciencia pero el martes vino el dueño del hotel a decirme que la dirigencia de Del Bono había pagado hasta ese día mi alojamiento y que el miércoles me tenía que ir. Fui a buscar al presidente, Salcedo Garay a la Subsecretaría de Trabajo. Lo esperé toda la mañana y al final, me dijo que no había dinero, que no me iba a pagar y que hiciera lo que quisiera. Increíble. Si su función es preservar los intereses de los trabajadores, cómo puede decir eso. Así que no tuve otra que volverme a Mendoza, sabiendo que en esta desvinculación hubo algo más que lo futbolístico. Para colmo, otro dirigente como Mario Saiz, quien se portó muy bien conmigo antes, se alejó mal y no tuve eco tampoco con él. Ahora yo digo si el técnico decidió que me fuera porque no estaba en sus planes, tendría que haber analizado con los dirigentes si había dinero para desvincularme como tiene que ser. Se equivocó, creo".

Galán llegó a San Juan el 15 de enero y luego de completar esa segunda quincena, cobró lo único que le pagó Del Bono desde su regreso al club: "Pagaron enero completo y yo cobré los quince días que había entrenado. Como correspondía. Pero después, no pagaron más. A mi me deben febrero y marzo. Eso quería cobrar pero hicieron irme y sin respuestas. Increíble pero real".