Desde que su hija Verónica sobrevivió a un choque cuando viajaba en moto con su hermano, hace cuatro años, Mary se opuso con firmeza a que su hija volviera a montar esos vehículos, más aún por la secuela que aún sufría por una fractura en su pierna derecha por aquel accidente. Mary tampoco quería que anduviera en bicicleta pero el último viernes un presentimiento la llevó a redoblar sus esfuerzos por impedir el viaje de Verónica desde su casa en La Otra Banda, hasta el centro de Jáchal. Pero la joven se salió con la suya y enfiló pedaleando rumbo al centro, para no perder el turno que le habían dado en la peluquería, contó ayer Mariela Mesías, prima de la víctima.
Minutos después, en una tarde clara, Claudia Verónica Díaz (37 años, soltera) sufriría un segundo accidente que ahora promete el peor final: cuando ya salía de Patricio López del Campo y empalmaba con Eugenio Flores rumbo al centro, un remisero que también iba al centro la embistió a pesar de frenar y la dejó con una fractura de cráneo y un pronóstico reservado.
Todo pasó a las 17.30 del viernes en ese complicado cruce en la zona conocida como El Topón, frente a la pileta del Club Argentinos de La Florida. Y representó también el segundo accidente para el conductor de ese remís, Luis Norberto Carrizo, padre de familia, de 52 años. Aquel otro siniestro le había costado la vida a una mujer (ver Ya causó una muerte).
Carrizo conducía un Peugeot 504 y habría dicho que la joven se atravesó en su camino. De todos modos personal de la Seccional 21ra dirigida por el comisario inspector Néstor Mondaca, lo apresaron por orden judicial.
Verónica y dos hermanos más compartían la casa en La Otra Banda con su mamá, viuda, a quien le ayudaba. También le daba una mano a su hermana Mariela, que tiene un café en el centro jachallero.
‘El tránsito acá es un caos. Nadie respeta los límites de velocidad y me indigna que por esas imprudencias mi prima esté entre la vida y la muerte’, dijo Mariela Mesías.
