Los restos del primer gobernador constitucional de San Luis, José Santos Ortiz, y los de su esposa, Inés Vélez Sarfield, arribaron ayer a la Casa de Gobierno puntana desde Mendoza, donde estuvieron durante 175 años. Una comitiva de honor escoltó desde tierras mendocinas los restos del prócer -que murió asesinado junto a Facundo Quiroga- y pasadas las 13 fueron recibidos por el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, en terrazas del Portezuelo, donde permanecerán hasta hoy cuando los trasladarán a Renca, su lugar de origen, para su definitivo descanso.
