Parecía imposible, pero la Champions League brindó esta tarde una nueva jornada inolvidable con una remontada que quedará en la historia y la sufrió nada más y nada menos que el Barcelona de Messi. Roma le ganó esta tarde 3-0 y con el global de 4-4, avanzó a semifinales por el gol que convirtió en el encuentro de ida.

El partido comenzó mal de arranque para el Barcelona, porque a los 6 minutos Edin Dzeko abrió el marcador y puso rápidamente en partido a los romanos. Volvió a avisar el bosnio y también lo tuvo Schick, que apareció solo en el segundo palo y se lo perdió de cabeza Ter Stegen tuvo que aparecer para tapar el 2-0 en otra aparición de Dzeko, esta vez de cabeza. ¿Barcelona en el primer tiempo? Poca tenencia de la pelota y prácticamente sin llegadas. Solo dos tiros libres de Messi, que se fueron por arriba del travesaño.

Valverde nunca se movió del 4-4-2 para intentar liquidar la serie y los Culés nunca pudieron ser dominadores del trámite del partido. A los 13, Piqué bajó de un agarrón a Dzeko en el área y De Rossi la metió de penal para el 2-0 parcial, con el que los italianos quedaron a tiro de la clasificación. El capitán estuvo cerca del doblete y también se lo perdió El Shaarawy, quien se topó con una notable reacción de Ter Stegen. Caminaba por la cornisa el Barcelona, y terminó de caerse a los 37, cuando Kostas Manolas anticipó en el primer palo tras un tiro de esquina y decretó el 3-0.

Recién ahí se acordaron los españoles del arco de enfrente y en los minutos finales fueron en busca del descuento con más ganas que fútbol. Pero ya era tarde. La Roma no claudicó en defensa y la locura se terminó desatando con el pitazo final del árbitro Turpin.