Estos son los 20 más destacados según The Mirror: 

20. Partizan - Estrella Roja (Serbia)

19. Flamengo - Fluminense (Brasil)

18. Velez - Zrinjski (Bosnia)

17. Olympique de Marsella - PSG (Francia)

16. Ajax - Feyenoord (Holanda)

15. Manchester City - Manchester United (Inglaterra)

14. Milan - Inter (Italia)

13. Chivas - América (México)

12. Independiente - Racing (Argentina)

11.Olympiakos - Panathinaikos (Grecia)

10. Borrusia Dortmund - Schalke 04 (Alemania)

9. Gremio - Internacional (Brasil)

8. Liverpool - Manchester United (Inglaterra)

7. Lazio - Roma (Italia)

6. Nacional - Peñarol (Uruguay)

5. Fenerbache - Galatasaray (Turquía)

4. Al Ahly - Zamalek (Egipto)

3. Celtic - Rangers (Escocia)

 

"Llamar a este un mero desacuerdo entre dos divisiones religiosas, sería vender masivamente el mayor derby de las Islas Británicas. Las tensiones sociales, económicas, políticas y sectarias, se han combinado para hacer de esto clásico único en el fútbol mundial, uno que fue casi prohibido en la década de 1930 para reducir la tasa de criminalidad después del aumento de las bandas callejeras de Glasgow". 

2. Real Madrid - Barcelona (España) 

 

"En términos de calidad, historia, significación, agravio e identidad, El Clásico se mantiene en el pináculo de las rivalidades futbolísticas. La cabeza de cerdo que los fanáticos del Barca lanzaron a Luis Figo ha llegado a simbolizar el desdén que sienten por un lado el otro".

 

1. Boca Juniors - River Plate (Argentina) 

"Este partido es el mejor ejemplo de la guerra de clases en el fútbol, un tema común a lo largo de nuestra cuenta regresiva. En la esquina azul y amarilla tenemos a Boca Juniors, que proviene del barrio de La Boca, de la clase trabajadora, y se ha mantenido fiel a estas raíces desde su formación en 1905. En la esquina roja y blanca tenemos a River, antiguo vecino de Boca, que se lanzó hacia los elegantes suburbios de Núñez en 1923. A medida que River comenzó a aumentar financiero en los años 30, cosió las semillas de un choque de identidades que se convirtió en un odio puro y sin adulteración entre los bandos, que ha dominado el fútbol argentino durante casi un siglo".