Boca Juniors cayó anoche sin atenuantes por 2 a 0 en su visita al nuevo puntero del campeonato de la Liga Profesional, Argentinos Juniors (comparte ese halago con Atlético Tucumán), en el estadio Diego Armando Maradona en el cierre de la primera jornada de la novena fecha. Los dirigidos por Milito anestesiaron a Boca en el primer tiempo con las conquistas de Gabriel Carabajal y Gastón Verón, a los 23 y 42', respectivamente.

El tanto de Carabajal fue un verdadero golazo tras un derechazo desde afuera del área grande que se incrustó contra el ángulo superior derecho del arco defendido por Agustín Rossi, mientras que el segundo fue obra de un cabezazo bombeado de Gastón Verón, que está reemplazando con éxito al lesionado Gabriel Ávalos.

La clave de esa diferencia en el marcador estuvo originada en el juego, donde se enfrentaron un Argentinos Juniors sólido en su desarrollo grupal ante un Boca Juniors que es un cúmulo de individualidades que no logra cohesionar. Lo que necesitaba el conjunto de La Paternal para transformar en victoria su superioridad era tener contundencia, y la encontró en esos primeros 45 minutos, para "planchar" la fisonomía del partido.

No pudo. El "Changuito" Zeballos intenta dejar fuera de foco a su marca. Boca volvió a mostrar sólo individualidades pero fue superado claramente por el buen juego grupal de Argentinos.

Pese a que Reniero reiteró su marcada ineficacia goleadora más allá de todo lo que obliga en ataque, su acople con Verón resulta una carta ganadora para el Bicho.

En Boca, en tanto, la presencia de Vázquez en el centro del ataque desde el comienzo se pareció mucho a una despedida para el delantero que podría haber jugado su último encuentro en el "xeneize" ya que su futuro estaría en Brujas, de Bélgica. Mientras que Benedetto pareció quedarse en el banco más por sus últimas flojas prestaciones que por algún "castigo" similar al sufrido por Izquierdoz. A Ibarra las variantes no le dieron resultados. En el complemento, Orsini, uno de los dos centrodelanteros que estuvieron desde el arranque, hacía un rato que estaba sentado en el banco junto a un Fabra muy molesto por haber sido relevado poco antes por Sández. Tampoco dieron resultados los ingresos postreros de Ramírez y el mencionado Benedetto. Es que Boca nunca dejó de ser una sombra en su paso por La Paternal.