Flamengo, vigente campeón de la Copa Libertadores y del fútbol brasileño, logró una victoria por 3-0 contra el Bangu en el partido que supuso el regreso del fútbol a Sudamérica tras tres meses de parate por el coronavirus, en el partido del Campeonato Carioca.

El uruguayo Giorgian De Arrascaeta, que el 14 de marzo había marcado el último gol del Flamengo antes de la paralización por el COVID-19, abrió el marcador en el minuto 18 y encarriló el contundente triunfo.

En la segunda mitad, Bruno Henrique, a los 15 minutos, y Pedro Rocha, a los 44, sentenciaron el resultado.

El partido se disputó a puerta cerrada en el mítico estadio Maracaná de Río de Janeiro, a pocos metros de uno de los hospitales de campaña instalados en la ciudad para atender a pacientes con la COVID-19.

El técnico de Flamengo, el portugués Jorge Jesús, salió casi con el mismo once con el que jugó en noviembre la final de la Copa Libertadores contra River, con un único cambio obligado: el central español Pablo Marí, traspasado al Arsenal inglés, fue reemplazado por Léo Pereira

El histórico y modesto Bangu, equipo de la Serie D brasileña, no pudo hacerle frente a un rival que, pese a la inactividad física, está en otro nivel.

El partido pudo llevarse a cabo después de que el alcalde de Río de Janeiro, Marcelo Crivella, autorizara el lunes la disputa de eventos deportivos a puertas cerradas.

Antes del duelo, hinchas de lamengo, Bangu, Fluminense, Vasco da Gama, Botafgo y América protestaron en una de las entradas del Maracaná con pancartas contra el gobierno federal, el gobierno regional y la alcaldía de Río de Janeiro por el regreso del fútbol.

Los jugadores de ambos equipos se midieron la temperatura al llegar al estadio, mientras que los periodistas y fotógrafos tuvieron que pasar por un túnel de desinfección.

Protestas en las afueras del Maracaná por la reanudación del fútbol en Brasil en medio de la pandemia del coronavirus.

Los dos conjuntos guardaron un minuto de silencio en homenaje a las casi 50.000 víctimas del coronavirus en Brasil. El Flamengo también homenajeó antes del encuentro a su masajista Jorginho, quien murió a inicios de mayo víctima del virus.

El regreso del Campeonato Carioca enfrenta la resistencia de algunos clubes, por la situación sanitaria de Río de Janeiro, el segundo estado de Brasil más afectado por el COVID-19, tras Sao Paulo.