El escapulario con la imagen de la Virgen que ya cuelga sobre el pecho de Sergio Cerdera sirve como presentación. Ese trozo de tela rectangular de color marrón, con hilos dorados que forman la figura, bendecido el domingo pasado, acompañará toda la vida al motociclista que tendrá su debut en el Dakar que comienza el próximo 1 de enero.

Cerdera es el último en sumarse a la mesa donde ya charlaban los otros sanjuaninos que participarán en la carrera. Ricardo Martínez, también debutante, con Toyota SW4, coincidía con Lino y Juan Pablo Sisterna, que van por su tercera prueba, y con el mismo buggy que compitieron en la prueba pasada, en que lo importante para cumplir con el gran objetivo que es hacer todo el recorrido, será fundamental tener paciencia y fortaleza en cada etapa.

“Estás más flaco”, elogió Lino a Ricardo cuando se vieron, lo que demuestra que ya se conocen. “No sabés lo que son los baños en Copiapó”, agregaba frunciendo al máximo su frente. “No te preocupés, llevo casilla rodante”, respondió Ricardo, quien antes había aclarado que no se siente un aventurero, sino un explorador en este desafío: “Un aventurero es alguien que le decís ‘andá a Lima’ y parte sin saber nada. Por mi trabajo en minería, yo sé como preparar un plan para llegar a un lugar, utilizando distintas fuentes de información y conocimiento. Con una brújula es suficiente”.

Cerdera ya había reconocido que los Sisterna le habían pasado muy buena información para prepararse a esta prueba, que comenzó a inquietarlo cuando vio el arribo en Albardón este año de las motos. “Luego vino la invitación del equipo Kawasaki y gracias al apoyo de mucha gente, especialmente Dante Elizondo hoy podré vivir esto”, señaló. La historia de Martínez fue casi de casualidad. “Conozco a Sebastián Halpern (subcampeón en quads) por el trabajo y cuando dijo que quería ser navegante en un auto este año, estuvimos buscando un piloto. No lo encontrábamos y cuando me lo sugirió, en abril, me embarqué”, repasó.

Se consultaron sobre el día y horario de verificación y se animó a entrar en la charla el holandés Johnny Hakvoort, el jefe del equipo que trabaja en el buggy de los Sisterna.

Y se animan a contar los que harán si llegan a Lima, la meta final. Martínez descorchará un Syrah sanjuanino. Los Sisterna se cortarán el pelo y lo comprometieron a Cerdera, que aceptó gustoso. Saben que para eso todavía falta mucho. Por lo pronto, Cerdera partirá hoy a Córdoba para ultimar detalles con el equipo, Martínez saldrá el domingo y los Sisterna, el martes. Faltan 10 días para que comience el Dakar, una experiencia que ya marcó sus vidas.