Si bien la actualidad los encuentra en categorías diferentes, nadie puede dudar que San Martín y Sportivo Desamparados son los equipos más grandes de San Juan. Sin embargo, se encuentran estancados en una crisis que los tiene al borde del abismo.

El Verdinegro, de la mano de Pipo Gorosito, aún no logra ganar y su continuidad en Primera División está en peligro. Sobre todo porque juega mal, no llega al arco rival y cuando lo hace, no concreta. Ayer empató de local, sin goles, frente a un rival directo en la lucha por no descender. Lo más preocupante es que sólo tuvo dos remates al arco en los 90 minutos. 

Desde que el ex DT de River y Argentinos, entre otros, asumió como entrenador, San Martín sólo convirtió un gol en cinco partidos. Lo hizo Dening en la derrota ante Boca por 2 a 1. En las 19 fechas que se llevan disputadas del torneo, los de Concepción están entre los 3 quipos más goleados con 29 tantos en contra y los que menos marcaron, con sólo 15. 

En la era Gorosito, San Martín obtuvo tres puntos de quince en juego.

A ocho puntos del descenso, en el viernes visitará al siempre complicado Lanús, en La Fortaleza. 

Sportivo Desamparados

La situación del Puyutano en el Federal A es complicadísima. El sábado, en el inicio de la segunda ronda de la Reválida, dejó escapar un partido increíble frente a Juventud Unida de San Luis. Los de Antuña arrancaron ganando, desperdició chances claras de gol y como suele pasar, los goles que se pierden en un arco se convierten en el otro. Fue 2 a 1 sobre la hora para los visitantes.

De esta manera, el Víbora está último en su grupo junto a Concepción de Tucumán, su rival de la próxima fecha. Tiene la obligación de ganar, ya que después de ese choque restarán tres partidos, contra San Lorenzo de Catamarca, San Jorge de Tucumán y Gutiérrez de Mendoza, a priori, el más accesible. 

Desamparados tiene 21 puntos y la necesidad imperiosa de sumar para evitar el descenso.