Este jueves regresó La Liga de España, luego de la larga pausa causada por la pandemia del coronavirus, nada más ni nada menos que con el Gran Derbi en el que Sevilla venció 2-0 al Betis. El autor del gol que rompió el cero y permitió que en el país europeo se volviera a gritar un gol fue Lucas Ocampos, quien marcó de penal. En ese momento, la locura del plantel fue total, y el festejo fue furioso y sin distanciamiento, lo contrario a lo que se recomendó en la previa.

Y en su vuelta, Ocampos confirmó la influencia que puede tener en el equipo de Lopetegui (porque también puso la asistencia en el 2-0 de Fernando). Pensar que había estado en duda en la semana por una molestia muscular que no le permitió entrenarse con normalidad. Pero finalmente se dio el gusto de regresar con todo. Fue reemplazado a los 25 del segundo tiempo por Ever Banega.

Antes de esta pausa en la competencia, el delantero argentino venía de anotar cinco goles en los últimos seis encuentro de La Liga, lo que lo llevó a ser una de las revelaciones de la temporada. Nada mal para su primera campaña en España.

El ex River ahora suma 11 goles, y es el argentino que sigue más de cerca en la tabla goleadora de la Liga a Messi (19). Con este triunfo, el Sevilla quedó tercero, a ocho unidades del Barcelona.