El Barcelona español puede jugar mal o más o menos, pero siempre aparece una figura para salvarlo. La jerarquía de su plantel, como pasa también con Real Madrid, siempre prevalece en la Liga. Y ante Leganés no fue la excepción, primero con Ansu Fati y luego con Lionel Messi, cuándo no, quien pudo sumar un nuevo grito (ya lo había hecho ante Mallorca) pero que se quedó a uno de la inmensa cifra de 700 anotaciones como profesional.

Se trató de una nueva victoria -segunda consecutiva- en este regreso del fútbol por 2-0 en el Camp Nou para volver a sacarle cinco de ventaja en la punta a Real Madrid, que juega mañana un duelo complicado visitando al Valencia.

El primer tiempo estuvo lejos de ser bueno para los catalanes, más allá del 1-0 parcial marcado por Ansu Fati con un buen latigazo de derecha. Leganés tuvo las más claras en esa primera parte ante un local con pocas ideas. Movimiento de pelota sin profundidad, casi sin chances y con un Messi por momentos fastidioso al moverse y no poder entrar en juego o ser desequilibrante. ¿Lo más destacado? Un tackle que le hizo el 3 de la visita y un cabezazo desviado sobre el final.

Ya en la segunda parte, con el resultado a favor, Messi y Barcelona crecieron un poco. Leo habilitó primero a Semedo para una jugada anulada tras gol de Griezmann y al toque lo mejor del 10: agarró la pelota en mitad de cancha, gambeteó y llegó al área fabricando un penal. El árbitro compró y el crack lo canjeó por gol para el 2-0 y para el gol 699 en su carrera. Además, un festejito particular.

Levante no aprovechó las poquitas chances a su favor (Carrillo contó con una que se fue pegada al palo; Jony Silva fue titular) y terminó con las manos vacías ante un rival que hizo la diferencia gracias a sus figuras. El próximo partido de Messi y compañía será el viernes contra Sevilla, donde podrá alcanzar los 700 gritos.

Messi armó la jugada, Messi fabricó el penal con un jugadón previo, Messi lo pateó y Barcelona volvió a ganar en el Camp Nou contra el Leganés. En el festejo, hizo de todo, en pocos segundos.

Primero trotó y celebró con sus compañeros, con Suárez, Vidal y compañía. Luego saludó a Piqué y quedó de frente a la tribuna, vacía: ahí improvisó parándose firme, estirando su brazo derecho y luego tirando un beso al aire. Finalmente, al volver hacia la mitad de la cacha, levantó los brazos hacia el cielo, como es habitual.

Fue una buena noche la de Leo en su vuelta al Camp Nou, con un muy buen arranque de segundo tiempo luego de un primero en el que estuvo apagado como su equipo. Convirtió uno de penal y su Barcelona sigue puntero.

El rosarino ya había convertido en el arranque de esta nueva parte de la temporada el domingo anterior y repitió anoche de local, jugando todos los minutos de ambos encuentros.

Sin dudas, otra gran temporada para Messi quien se convirtió en el primer futbolista en la historia de la Liga de España en marcar 20 o más goles en 12 campañas seguidas. A punto de cumplir 33 años, el zurdo acumula en esta 2019-20 nada menos que 21 tantos.

Furor
 

Messi revolucionó una vez más las redes sociales y en este caso fue por el buzo con que llegó a jugar en el Camp Nou. El rostro del actor Marlon Brando tenía el rosarino en su prenda, cuyo costo es de 782 dólares y propiedad de la marca Dolce&Gabbana.