ALGARABÍA ARGENTINA. Las chicas festejan el pasaporte al partido que coronará al nuevo equipo campeón del mundo, desatando toda la tensión contenida tras un encuentro muy disputado.


Hubo que sufrir mucho para festejar tanto. Luego de algunas definiciones en penales australianos perdidas contra quien será el rival en la final de hoy, Países Bajos, un manto de incertidumbre cubrió el cielo del estadio olímpico de Terrasa, donde se está disputando la sede española del Mundial de Hockey sobre Césped femenino, que culminará hoy con el partido entre argentinas y neerlandesas. Emocionó ver a la capitán Rocío Sánchez Moccia correr para abrazarse con todas sus compañeras tras convertir, en el segundo intento, el "shoot out" decisivo, el que le daba a la selección que dirige Fernando Ferrara el pasaporte a jugar una nueva final del mundo.

En el partido que se disputará, desde las 16.30 de hoy (por ESPN), el seleccionado argentino buscará nada menos que su tercera conquista ecuménica. El objetivo de este equipo que está invicto en el año (solo perdió con Países Bajos en definiciones por penales, luego de empatar en el tiempo regular; es repetir los logros conseguidos en el 2002, en Perth, Australia; y en el campeonato que tuvo como sede Rosario, en 2012.

Fue un partido jugado bajo una tremendo tensión emotiva que se definió por 4 a 2 en esa definición en la que, además de Sánchez Moccia, acertaron Albertario, Thomé y Alonso (Jankunas falló el primero), luego que el encuentro, sumamente disputado en el que no pudieron vencerse y culminaron 2 a 2.

Alemania golpeó de entrada cuando apenas se habían jugado 30 segundos y Hanna Granitizki desvió el primer córner corto para conseguir el 1-0. La respuesta de las argentinas fue rápida pero Gorzelany no pudo marcar con el fijo que tuvo a los 3 minutos. Pero la goleadora tuvo su revancha cuando en el tercer corto (el segundo consecutivo tras un pie de la salidora), Agustina Gorzelany estableció el empate parcial a los 14 minutos.

Algunos nervios y desacoples defensivos les permitieron a las alemanas tener una chance clara en el inicio del segundo cuarto aunque Succi apareció para salvar el segundo tanto del equipo germano. Cuando las Leonas tuvieron frialdad para atacar, llevaron peligro. Y el peligro se tradujo en el gol de Agustina Albertario a los 27 minutos tras una gran jugada de Toccalino por la derecha.

Ya en el complemento, sin los nervios de la primera parte, las argentinas se hicieron amplias dominadoras del juego, controlando el campo y la pelota, obligando al equipo teutón a defenderse muy cerca de su arquera. Fue un tercer cuarto sin mucha acción en el que apenas hubo un fijo que no pudo capitalizar Costa Biondi. Y en el mejor momento de Argentina llegó el 2-2 alemán. A los 14 minutos Charlotte Stapenhorst tomó un rebote de Succi para marcar.

En el último cuarto, el seleccionado albiceleste se fue con todo al ataque, con la idea de no llegar a la definición por penales australiano. Hubo un par de acciones claras en las que Thome primero y Gorzelany después, no estuvieron finas en la definición. Pero el resultado no se movió. Hasta que llegaron los penales. La angustia y el festejo merecido para que este domingo las Leonas vayan por todo en el Mundial.



Una final con historia
Argentina y Países Bajos definieron tres mundiales. El primero en Mandelieu (Francia) en 1974, fue para las neerlandesas 1 a 0. Luego, en Perth (Australia) 2002 y Rosario 2010, el triunfo fue para Las Leonas. En Australia 4-3, por penales; y en Rosario 3 a 1.