Ayer se sorteó el cuadro masculino del Abierto de Australia y Diego Schwartzman (13 del mundo), el mejor tenista argentino, abrirá el torneo ante Filip Krajinovic (39no), compatriota y amigo de Novak Djokovic. El Peque llegó a octavos de final en dos ocasiones y en la edición 2021 cayó en tercera ronda ante Aslan Karatsev, una de las revelaciones de la temporada.

En cuanto a los otros argentinos que tomarán parte del certamen, que comenzará el lunes próximo en la ciudad de Melbourne, el rosarino Federico Delbonis (42do) jugará ante el español Pedro Martínez (61ro), el rosarino Federico Coria (64to) ante el francés Gael Monfills (19no), el rosarino Facundo Bagnis frente al chileno Cristian Garín (18vo), el porteño Juan Manuel Cerúndolo (81ro) ante un adversario de clasificación y el porteño Sebastián Báez (95to) frente al español Albert Ramos Vinolas (44to).

El sorteo se inició con un retraso de una hora y se desarrolló mientras se aguarda que el ministro de Inmigración australiano, Alex Hawke, se pronuncie sobre la permanencia de Djokovic en el país (ver recuadro).

Por como se ha dado el sorteo, en las casas de apuestas se "armaron" los posibles choques de octavos de final, y se incluye a los primeros 16 cabeza de serie. De llegar a dicha instancia a Schwartzman le tocará bailar con la más fea, el ruso Daniil Medvedev, número 2 del mundo, que pretende destronar en este certamen a Djokovic.

Los cuadros decisivos quedarían así: Novak Djokovic (1) contra Cristian Garín (16), Cameron Norrie (12) contra Matteo Berrettini (7), Alexander Zverev (3) contra Denis Shapovalov (14) Hubert Hurkacz ( 10) contra Rafa Nadal (6). La otra llave sería: Casper Ruud (8) contra Jannik Sinner (11), Roberto Bautista (15) contra Stefanos Tsitsipas (4), Andrey Rublev (5) contra Felix Auger-Aliassime (9) y Diego Schwartzman (13) contra Daniil Medvedev (2). Anoche, al cierre de esta edición, los argentinos Marco Trungelliti y Tomás Martín Etcheverry jugaban sus pases al cuadro principal.

Djokovic sigue en veremos

Con la amenaza de que el ministro australiano de Inmigración, Alex Hawke, haga uso de sus "poderes especiales" y dictamine su deportación, el serbio Novak Djokovic, número 1 del mundo, sigue entrenando y ayer fue sorteado como primer cabeza de serie del Abierto de Australia, primer torneo Grand Slam del año, y debutaría ante el estadounidense Marcos Giron.

Una fuente del gobierno australiano confirmó a los diarios Sydney Morning Herald y The Age que el ministro de Inmigración podría pronunciarse hoy sobre este caso, que ha puesto de manifiesto la dura política de inmigración del país y su apuesta por la vacunación contra el covid-19.

Desde que el pasado lunes la justicia diera la razón a Djokovic y le permitiera quedarse en Australia, Hawke se ha limitado a decir que mantiene la posibilidad de usar los poderes especiales que le otorga la ley para deportar al tenista por no cumplir los requisitos impuestos por la covid-19 para entrar al país.

Sin embargo, el número 1 del mundo del ranking ATP guarda una carta legal más bajo la manga después de ganar la primera batalla en tribunales. Integrantes de su entorno le confirmaron al diario local The Age que su equipo legal "llevaría inmediatamente" el tema ante la Justicia una vez más para apelar la decisión.