Una frase tan fría pero muy cierta a la misma vez. "Nada es para siempre". Después de 43 partidos en los que Unión había logrado resultados positivos en su reducto, le tocó sufrir y perder su abultado invicto ante su gente al ser vencido por el último equipo de la tabla, Gimnasia, en la 17ma. fecha del grupo cinco del Argentino B.

La última vez que perdió El Azul en su cancha fue el 23 de enero del 2005. Luego, en los papeles, perdió en dos ocasiones, la primera ante Del Bono por 3-5 donde Unión hacía de local en cancha de Trinidad, y luego en el campeonato en curso en la 12da. fecha ante Alianza. El partido quedó suspendido por incidentes y el Tribunal de Disciplina definió darle por ganado 1-0 el encuentro al Lechuzo. Esta derrota fue ante Guaymallén por 1-0, y, casualidades del destino, o ironía, el técnico en ese entonces era Miguel Ángel Buxó, quién es el actual técnico de Gimnasia.

Unión pagó muy caro el poco rodaje de fútbol que tenían los refuerzos, como así también el resto del plantel, que no suele estar entre los titulares. Fue el caso de Barrionuevo y Pussetto, donde la defensa fue muy inestable dejando baches para que los atacantes del Lobo los aprovecharan. El poco rodaje del Coqui Chica y la mala tarde de Ernesto Fullana provocó imprecisiones en el medio campo y poca retención de la pelota. Mientras que en el ataque, el Gino Marcelo Laciar no se vio, y Javier Villeseca continúa en la sequía.

Por su parte, Gimnasia no propuso mucho, pero fue firme, aguerrido y con mucha pierna fuerte (en ocasiones cometió reiteradas faltas). Supo aprovechar las falencias de su rival para generar llegadas de peligro. Incluso a sólo dos minutos del inicio del encuentro, Baldaccin remató al arco y Biasotti contuvo en dos tiempos.

El local no fue claro en las llegadas, pero podría haberse puesto en ventaja en dos veces, ambas de la mano de Eduardo González, quien estuvo en el mediocampo por el sector derecho. En la primera fue un cabezazo donde Marcó se lució al retener la pelota, y luego con un remate del Bichín Sánchez, pero el Wali no pudo conectar y la pelota se fue afuera.

En el complemento Unión salió mejor, y el ingreso del Pachi Pascual por Laciar fue un buen acierto ya que en dos ocasiones estuvo a un paso de marcar, pero en la primera a la pelota la sacaron en la línea en luego despejó el arquero.

Gimnasia llegó reiteradas veces, y cuando parecía que todo terminaba en igualdad, apareció Sebastián Sánchez, que luego de la asistencia de Matías Guerra, de cabeza marcó el gol para amargar al pueblo Azul y cortarle el invicto en su cancha.