El arquero argentino de Tigres de Monterrey, Nahuel Guzmán, quien atajó tres remates en la definición por penales del campeonato mexicano ante América, aseguró que fue un “resultado heroico” y que le hubiese gustado que la final revancha, que terminó 1-1, no tuviera un desenlace tan infartante.

“Un resultado heroico por cómo se dio todo, no sólo por la tanda de penales, ya casi sin tiempo el equipo nunca bajó los brazos, corrió con el corazón y tuvo su premio”, destacó Guzmán, que festejó su tercer título con Tigres en el fútbol mexicano, ya que en la temporada 2015-2016 se alzó con el torneo Apertura y el trofeo Campeón de Campeones en la temporada 2015-16.

Edson Alvarez adelantó a América en el tanteador a los cinco minutos del primer tiempo suplementario, pero un agónico gol de Jesús Dueñas, cuando se agotaba el tiempo extra, forzó la definición por penales, donde el ex Newell’s Old Boys contuvo los remates del brasileño William Da Silva, el cordobés Silvio Romero y Javier Güemez.

“No, los héroes están en otra parte”, sentenció el arquero del seleccionado nacional, quien también fue artífice principal en la obtención del Apertura 2015 cuando atajó dos penales en la definición ante Pumas.

Sin embargo, el “Patón” destacó el trabajo de sus compañeros y dijo que la obtención del campeonato “es mérito de todos los integrantes del plantel”.

“Estuvo al límite, fue demasiado lindo. Habría estado más lindo ganar tranquilo, pero las finales se juegan así. Los dos equipos que jugaron esta final son los mejores de México y lo volvieron a ratificar. Se sufre de más, no hay explicación”, finalizó.

No corrió con la misma suerte Agustín Marchesín, el arquero de las Águilas que no pudo contener ninguno de los tres. También jugaron en el equipo perdedor Rubens Sambueza y Paolo Goltz.