En el Monumental, River Plate totalmente le ganó 2 a 1 a Platense. José Paradela puso en ventaja al conjunto local a los 11 minutos, pero rápidamente Brian Mansilla (14′) anotó el empate transitorio tras un blooper de la defensa rival. En el complemento, Julián Álvarez anotó el segundo para su equipo, mediante un controvertido penal. 

River Plate fue muy superior en el primer tiempo. Con una línea de tres en el fondo, con Javier Pinola de capitán y jugando como stopper por la izquierda, el Millonario se paró en campo contrario y controló las acciones. A los tres minutos, tras una buena combinación entre Braian Romero y José Paradela, este último remató cerca. Cinco minutos después, Palavecino fue quien probó desde la medialuna, tras una buena jugada colectiva.

Hasta que a los 11, Paradela convirtió luego de una buena jugada con pases de primera, algún que otro rebote a su favor, y acomodando la pelota de izquierda a derecha, para convertir tras un remate muy fuerte. Merecida ventaja parcial para el conjunto local, que mediante un blooper sufrió la igualdad rápidamente.

Es que Platense en la primera aproximación que tuvo hacia el arco de Centurión sacó provecho del error de la última línea del local y empató por intermedio de Brian Mansilla. El arquero pasó la pelota para González Pirez que cuando se lo devolvió, dejó la pelota en el medio entre el guardameta y de Mammana. Hasta ahí corrió Tijanovich, se adueñó del balón y habilitó a Mansilla, quien definió con el arco a su merced.

A los 15′, otro error en el fondo de River Plate terminó con el mismo Mansilla realizando una gran acción individual ante Pinola y un pase al corazón del área, que justo alcanzaron a despejar.

Pese a ello, Plantese nunca pudo meterse en el partido y esta etapa la terminó padeciendo. Sus constantes errores defensivos, más la presión de River Plate, generaron que su arquero De Olivera tuviera que intervenir con tapadas clave. Como a los 21′, con un buen remate a colocar de Ferrerira que el arquero voló para manotear al córner. Paradela y Palavecino se adueñaron de las acciones y todas las jugadas de peligro del Millonario nacieron desde sus pies. Pala volvió a llevar peligro y casi convirte con otro disparo que fue controlado abajo por el ex arquero de Nueva Chicago.