Liquidado. Matías Suárez ya hizo lo suyo y sentenció la historia ante Lanús. River volvió a su nivel y ganó por primera vez en la Superliga. El Granate nunca encontró el nivel.

River Plate superó con claridad, contundencia y buen juego a Lanús por 3 a 0, y logró la primera victoria en la Superliga de fútbol, en un partido por la segunda fecha del torneo local jugado en el estadio Monumental. El colombiano Rafael Santos Borré, de tiro penal, en la etapa inicial, y el cordobés Matías Suárez, en dos ocasiones, uno en cada tiempo, marcaron para el actual campeón de América. Un River muy activo se adueñó del protagonismo en el primer tiempo. Más rápido, más intenso, con presión constante, con entrega y con control de juego, el conjunto que dirige Marcelo Gallardo no pudo ser neutralizado por Lanús, que estuvo muy replegado, apostó al contraataque, pero lo hizo tibiamente y estuvo siempre perdido en la cancha.

El equipo de Núñez presionó bien arriba, jugó mejor en los espacios cortos y achicó bien cuando la tuvo el "Grana", por lo cual no extrañó que llegara a la apertura a los 23 minutos. Lautaro Valenti derribó a De la Cruz en el área grande y la pena máxima la concretó el colombiano Borré, con un certero remate al palo izquierdo de Agustín Rossi.

A los 30, tras una excelente habilitación de Ignacio Fernández, entrando por izquierda Matías Suárez (figura del "Millo"), con un remate cruzado que pegó en el segundo palo y se metió, marcó el 2 a 0 parcial y la autoridad con que River se fue al descanso.

La parte final no varió en su desarrollo, River manejó a voluntad las acciones y Lanús no inquietó en ningún momento, por lo que no extrañó que los conducidos por Marcelo Gallardo contaran con otra inmejorable opción de aumentar el marcador, pero el uruguayo Nicolás De la Cruz la desaprovechó al malograr un tiro penal, a los 20 minutos. El volante, quien ingresó en el comienzo del segundo tiempo por el colombiano Jorge Carrascal, le pidió el remate a Borré, pero "canchereó", pico la pelota y Agustín Rossi, de muy buena labor pese a la derrota, se quedó con el frustrado disparo.

Presión. Facundo Quignón trata de anticipar a Rafael Santos Borre. El colombiano fue de lo mejor en un River que volvió a ser River.

La revancha de Suárez

Matías Suárez venía con la espina clavada del penal errado en el Monumental en el minuto final del partido que River empató sin goles en la ida con Cruzeiro en la Libertadores, pero ayer pudo resarcirse marcando por primera vez dos tantos con la camiseta "millonaria" frente a Lanús. "Desde el primer minuto salimos a buscarlos y gracias a Dios se nos abrió el arco. Tuvimos mucha intensidad y realizamos el partido que nos pidió Marcelo Gallardo", indicó el cordobés, tras convertir por primera vez dos tantos en un mismo partido.


En tanto, su compañero Ignacio Fernández apuntó que River "hoy (por ayer) jugó un buen fútbol. Y a partir de ahora vamos a jugar mucho mejor de lo que lo veníamos haciendo. Y además era importante volver a ganar después de cuatro empates seguidos", apuntó.

Gonzalo Montiel, por su parte, ratificó que Gallardo "siempre" le pide que pase desde su posición de lateral derecho al campo rival, cosa que intenté".

"No sé si nos encontramos con la mejor versión de River, pero vamos mejorando poco a poco. En el primer tiempo hicimos todo lo que nos dijo el técnico y en el segundo sentimos un poco el desgaste", explicó.

Un penal, una canchereada

Canchero. De La Cruz eligió picarla y perdió
 

La escena sucedió a los 20 minutos del primer tiempo de la victoria de River 3-0 ante Lanús: Nicolás de la Cruz se metió en el área para buscar una pelota en cortada, observó que Valenti se tiró peligrosamente al césped para barrerlo y se aprovechó de su imprudencia. Juntó los pies, saltó cuando percibió el primer contacto y Germán Delfino compró. Penal.

Lo que se suponía una buena oportunidad para el dueño de casa en pos de ampliar el resultado, terminó configurando un motivo de discusión. Es que el uruguayo, de 22 años, se envalentonó y quiso hacerse cargo del remate desde los 12 pasos. Y Rafael Santos Borré, autor del 1-0 justamente de penal, le pidió el balón para repetir su faena. Allí se dio una disputa entre ambos: el colombiano se acercó para tomar la pelota de manos de De la Cruz, el enlace lo corrió con su mano izquierda. Hasta ahí, una típica puja entre dos compañeros por un penal. Borré se lo cedió a De la Cruz. Y el uruguayo encaró al arquero y a la hora de impactar el balón lo picó, con displicencia y a un costado, propiciando la atajada con total facilidad de Agustín Rossi. La cámara no fue con el gesto de Marcelo Gallardo, pero en la transmisión oficial del encuentro confirmaron que al entrenador no le gustó demasiado la determinación. El DT cree en la "confianza" de los futbolistas a la hora de elegir el pateador. Pero la resolución, una "canchereada", fue la que provocó el disgusto.