"Sabíamos que si hacíamos bien las cosas, nos íbamos a llevar el triunfo. Lo demostramos desde que arrancó el partido, porque lo fuimos a buscar. Tuvimos las mejores situaciones, sobre todo en el primer tiempo y la verdad es que estoy muy conforme con el rendimiento del equipo". Monólogo de Daniel Garnero, el técnico de San Martín, que fue uno de los últimos en salir del camarín ganador. Todo al revés cuando terminó el partido, porque pasó al lado del racimo de jugadores Verdinegros que se abrazaban y tocó a uno en señal de aprobación para meterse en la manga de inmediato.

Después, tras el final, agregó: "A ellos los dolió el gol, pero a nosotros nos confundió. Son cosas que tenemos que seguir arreglando. Es que después que Penco anotara, entramos en un desconcierto increíble en vez de estar más tranquilos. Y en el segundo tiempo nos pasó algo parecido. Perdimos la pelota y este equipo cuando la pierde no funciona. Teniéndola puede administrar juego e inclusive cansar al rival. Que no te ataquen además. Y al no tener la pelota todo esto se hizo más complicado".

Ante la pregunta de qué fue lo que más le gustó del equipo, el técnico aclaró que "la personalidad. Hoy los muchachos la demostraron y también la jerarquía, que es lo que se necesita para ser protagonista y pelear por cosas difíciles. No sólo mejorar en el juego, los niveles individuales, los estados de ánimo. Son todas cosas que suman pero sin personalidad no lo concretás".

Sobre esto último agregó: "Hay que ser inteligente. Vos, cuando te tenés que defender, lo tenés que hacer. Pero uno se puede defender con la pelota y nosotros lo logramos por momentos. Sí, es cierto, lo pudimos haber liquidado y no lo hicimos. Eso también tenemos que corregir, porque estábamos ganando y de visitantes. Pero son un montón de cosas que iremos conversando con los muchachos. Ahora vamos a tener una semana normal, larga. ¿El clásico que viene? Que se venga. Hay que pensar sólo en trabajar para seguir mejorando".