Este lunes, Alan Exequiel Arroyo fue condenado a 3 años de prisión efectiva por haber robado una moto y al contar con una pena anterior, estará 7 años y 9 meses en el Servicio Penitenciario Provincial.

El hecho

Hace algunos días, la dueña de la moto que fue sustraída, la dejó estacionada frente al kiosco de su hijo (como todos los días) en las inmediaciones de calle Santa Fe y Patricias Sanjuaninas, en Capital.

El hijo siempre controlaba el rodado pero en un momento pasaron varios colectivos juntos y por algunos minutos, perdió contacto. Luego desapareció y con la ayuda de un cliente, salió a buscar el rodado. Paralelamente, la damnificada llamó al 911 para dar aviso.

Por fortuna, lo encontraron tratando de desarmar la moto en un callejón ubicado en avenida Rawsona antes de Mitre y con la ayuda de personal policial, lograron detenerlo.

Arroyo tenía entre sus pertenencias, una pinza de podar con puntas que utilizó para romper el tambor de arranque. Además, llevaba un destornillador y dos tornillos que sujetan los plásticos de la moto y una llave falsa.