El fiscal Iván Grassi, uno de los coordinadores de la UFI Delitos Especiales, confirmó a este diario que no descarta formalizar una acusación contra el personal que atendió a Catalina Valdez (4) en el Hospital Rawson. Es decir, hay probabilidades de que les endilgue delitos penales y los someta a un proceso judicial que puede terminar con castigos como multas económicas o hasta prisión. Ya hay una médica complicada y aguardan un informe para sumar posibles sospechosos.

Catalina es la nena que falleció tras ser dada de alta. Había ingresado al Rawson a las 16.15 del martes 7 de este mes, luego de que el auto en el que circulaba con sus padres impactara contra un poste, en Capital. La autopsia arrojó que murió producto de una hemorragia abdominal interna, causada supuestamente por el cinturón de seguridad. Posiblemente en el hospital no detectaron esa pérdida de sangre y por eso la despacharon a su casa, alrededor de la medianoche. Según los datos recabados por los pesquisas, a las 23.30 se comunicaron telefónicamente Eduardo Valdez (38) y una cuñada suya que se encontraba afuera del nosocomio. El hombre le dijo que se fuera porque a Catalina no le iban a dar el alta esa noche, pero algo hizo que los profesionales cambiaran de decisión. Finalmente le dieron el alta y a su madre le indicaron que le diera ibuprofeno si tenía fiebre, consta en el expediente. Sin embargo, los problemas en la casa de los Valdez no tardaron en llegar. Cintia Sosa (37) declaró que pasada la 1 (ya del miércoles) notó que su hija tenía el abdomen caliente y al tomarle la temperatura el termómetro marcó casi 40´. Y agregó que de un momento a otro Catalina dejó de respirar, mientras permanecía con los ojos abiertos pero sin movimiento. Una ambulancia fue por el domicilio pero de nada sirvió porque cuando la pequeña entró nuevamente al Hospital Rawson, cerca de las 2.15, ya no tenía signos vitales.

Fiscalía también solicitó los registros de las cámaras de seguridad del Hospital Rawson

El fiscal Grassi, junto a sus ayudantes Pablo Orellano y Victoria Martín, enviaron al hospital un pedido de informe en el que deben aparecer los nombres de todos los profesionales (médicos y enfermeros) que atendieron a la víctima. Esa lista aún no había sido enviada por las autoridades, aunque los investigadores, por los testimonios recolectados, ya tienen identificada a una médica, que sería quien dio el ok final para darle el alta. La madre de "Cata" explicó ayer que hubo al menos dos pediatras más que estuvieron vinculadas a la atención.

Lo concreto es que a los acusados pueden imputarles el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público (art. 248 C.P.), que se castiga con prisión de un mes a dos años e inhabilitación especial por doble tiempo. La Fiscalía por otro lado analiza si cabe o no achacarles haber caído en una omisión de auxilio (art. 108 C.P.), cuya pena comprende una multa de $750 a $12.500, explicaron los voceros.

Cabe recordar que el padre de Catalina fue desligado de una investigación penal por el enorme daño moral que ya sufre por haber perdido a su única hija. El hombre supuestamente se quedó dormido al volante cuando regresaban del Médano de Oro, Rawson, dijeron fuentes judiciales.

Un pedido de justicia todos los meses


Los padres de la nena fallecida tras ser dada de alta adelantaron ayer a este diario que evalúan hacer una nueva manifestación el próximo 7 u 8 de octubre, y repetir el reclamo todos los meses en la misma fecha. Lo que buscan es que el caso no se encajone ni quede en la nada, dijeron. El último pedido de justicia fue el día 17 de este mes, cuando familiares, amigos, vecinos y todos aquellos que quisieron sumarse caminaron desde la casa de los Valdez hasta el Hospital Rawson (foto). Lo hicieron con carteles y flores blancas, en representación de "la pureza que había en el alma de Catalina". Ese día el padre de la nena defenestró la atención del principal nosocomio público de la provincia: "Todo el mundo que llega al hospital es despreciado, al personal le falta más humanidad y respeto".