Pablo Martín Morales Olivares fue condenado este martes en la mañana bajo el Sistema de Flagrancia a la pena de un año de prisión en suspenso por el delito de tenencia ilegítima de arma de fuego y amenazas agravadas. Pero al tener otra pena condicional, de 6 meses por un causa de violencia de género tramitada en Cavig, se le unificaron las condenas y va directo al Penal por el término de 1 año y 6 meses. Este hombre es hijo de uno de los dueños del conocido negocio Morales Motos.

Sobre el hecho por el cual terminó en el banquillo de los acusados, fuentes judiciales detallaron que el pasado 25 de mayo, a eso de las 5:20, un Renault Clio viajaba por Ruta 40 -de Sur a Norte- y que fueron colisionados por una camioneta Mitsubishi conducida por Morales, dañando el lateral izquierdo para luego acelerar la marcha y fugarse.

Ante ello, el conductor del Clío comienza a perseguir a la camioneta alcanzándolo recién a unos 50 metros antes de calle Sarassa (sobre Ruta N. 40), donde se ponen a la par. Allí es cuando el denunciante dice que Morales sacó a través de la ventanilla un arma de fuego y lo amenazó. 

Este último accionar fue observado por personal policial del Comando Radioeléctrico Central, quienes se encontraban en la intersección señalada en función de seguridad y prevención. Allí el patrullero da la voz de alto y empieza la persecución hasta a la altura de Sarasa al 899 (Este), donde finalmente es detenido

Al inspeccionar la camioneta, personal policial observa que sobre la butaca del asiento del acompañante se encontraba el arma junto a un cartucho suelto en la butaca. y debajo del asiento del conductor dos cartuchos más.