Las lágrimas se le cuelan, ineludibles. Antonela no aguanta la emoción y llora. Estaba muy entusiasmada con el festejo de sus 15 años el próximo 8 de enero (ya los cumplió el 29 de octubre pasado), pero desde que todo el dinero, unos $300.000, previsto para una celebración con 150 invitados, pasó a manos de dos ladrones, se instaló la duda y los ánimos no son los mismos en su casa. Ahora -dicen- viven todo el tiempo encerrados, con desconfianza, como la de su hermanito de 13 años que no quiere dormir solo. Las secuelas también se notan en su hermanita de casi 3 años, que cada tanto toma el teléfono y simula llamar a la ambulancia o la Policía para decirles que su mamá tiene sangre.

"Vamos a hacer todo lo posible para festejárselo. Nuestros familiares nos dijeron que nos van a dar una mano para que ella tenga su fiesta", promete el padre, Alberto Alvarez, un empleado público de 45 años.

El robo ocurrió el viernes 3 de diciembre pasado al mediodía en la casa que Alvarez y su esposa Johana Rigazzio (34) alquilan desde septiembre de 2018 en Salta, metros al Sur de Centenario, en Chimbas. Su casa es la primera en un predio donde también alquila otra familia y funciona una empresa.

Johana recordó ayer que estaba sola con su hija más pequeña, cuando entraron dos sujetos y la agarraron de los pelos obligándola a no mirar. "Tenían un cuchillo con el que me rasparon la frente y la cabeza (parte superior). La nena veía dibujitos en el teléfono y a mi me llevaron al dormitorio donde me arrodillaron y me dieron patadas porque no me creían que sólo tenía la plata del alquiler y la luz. Después revisaron y ahí dieron con el tacho de cartón donde teníamos la plata de un préstamo de $130.000, un aguinaldo y otras monedas que le agregábamos. Me hicieron tocar todo a mi para no dejar huellas", dijo ayer.

Según la mujer, el dinero de esa improvisada alcancía y el de otra más pequeña (un tarro metálico) en el que ahorraban para el cumpleaños de la más pequeña, se lo llevó un ladrón. Y el otro pretendía llevarse una mochila de su casa con una notebook y su celular, pero ella lo manoteó y logró recuperar todo. "Tenían todo estudiado. Se metieron por el fondo que da a una unión vecinal, a otro predio con canchas de fútbol y una finca. Parece que sabían que acá en el frente hay dos cámaras", dijo Alvarez.

En la Policía dijeron que la familia denunció sólo $260.000 y las víctimas reconocieron que así fue, pero ayer dijeron que cuando sacaron cuentas estimaron que el dinero sustraído era por lo menos $300.000. "Espero que no volvamos a pasar por algo así, nos hemos quedado todos con miedo", dijo la mujer.

  • Unos $14.000

Un hombre supo lo peligroso que es transitar por el interior del barrio La Estación, en Rawson. Según fuentes policiales, la víctima de 51 años (no fue identificada) conducía una Renault Kangoo cuando dos delincuentes en moto lo interceptaron y, luego de amenazarlo con un arma de fuego, lograron apoderarse de unos $14.000, el teléfono y las llaves del vehículo de la víctima. Por el caso, hay un sospechoso preso y una moto secuestrada.