Todo muy tenso. El silencio fue moneda corriente y por momentos sólo se escuchó el ruido de los escombros tiznados que fueron sacados del interior de la casa. El llanto de los vecinos, de la familia y de muchos curiosos también fueron parte de ese sonido que le puso más dolor a la jornada. Así, con la angustia a flor de piel y aún con la incomprensión de la tragedia, amaneció ayer el barrio Los Alerces, en Chimbas, donde el martes en la noche un incendio le arrebató la vida a una bebé de 2 años. Y mientras muchos se lamentaron, otros se acercaron a la casa de la familia Vila para entregar donaciones de ropa u ofrecer ayuda para limpiar lo que quedó de la vivienda. Este incendio, que según lo que confirmaron autoridades de Bomberos se inició cuando los niños estaban solos, está siendo investigado por el Juzgado Correccional a cargo de Mónica Lucero, quien dijo que están esperando las pericias para saber cómo se originó (ver aparte).

En una de las ventanas de la casa, un cartel escrito en papel rosa se mantuvo intacto. "Se venden prepizzas" decía ese cartel, mientras que a pocos metros de ese letrero escrito a mano, en una de las entradas de la casa una puerta totalmente ennegrecida mostraba un panorama extremadamente diferente. Frente a esa casa los gestos de dolor invadieron a cada uno de los que pasaron por la zona o que se ofrecieron a dar una mano.

Con cintas de peligro, algunos familiares de las víctimas cerraron el frente de la casa, mientras que otros con secadores para el piso, escobas y baldes que les prestaron los mismos vecinos sacaron el agua y los escombros que quedaron dentro de la vivienda luego de que las llamas fueran extinguidas. "La casa está inhabitable. Nosotros vinimos -ella junto a otros familiares- porque nos entregaron la casa y teníamos que sacar las pocas cosas que quedaron. Nos dijeron que la cerremos y eso estamos haciendo, además de limpiar un poco. No entendemos qué pasó y aún no están las pericias", dijo Carolina Vila, hermana del hombre que vivía en esa casa junto a su esposa y sus tres hijos de 5, 4 y 2 años. A pesar del dolor la mujer dijo estar agradecida por los gestos de solidaridad de los vecinos.

Desde las ventanas de su casas y sin querer dar muchos detalles e incluso sin identificarse "por respeto" a sus vecinos, la gente del barrio comentó cómo estaban viviendo ese momento. "Mi hija entró a mi casa y me dijo que escuchaba que alguien pedía ayuda y cuando vimos el humo salimos corriendo. Yo contuve a la nena de 5 años", dijo una vecina, mientras que otra dijo que el griterío y los pedidos desesperados de esa misma pequeña le quedaron grabados en la memoria. "Es gente buena y trabajadora", "ella -por la mamá- vendía semitas, pan y pizzas para poder darles de comer a sus hijos", "es una mamá que siempre estuvo presente y que no podemos criticarle nada" y "fue un accidente, ella siempre cuidó de sus hijos", fueron algunas de las frases con las que los vecinos, que se acercaron a casa a llevar bolsas con ropa u ofrecer hasta frazadas, dijeron sobre los damnificados.

Y, mientras que en el barrio de la tragedia el dolor se pudo percibir con sólo mirar a la gente de la zona, en otro rincón de Chimbas, los papás de la bebé fallecida y sus hermanitos esperaban que les entregaran la documentación y el cuerpo de la nena. "Soy la abuela -paterna-, la dueña de la casa. No vamos a dar declaraciones, lo único que digo es que mis otros nietos están bien", dijo Susana Vila, mientras que su hijo Cristian y su nuera Bárbara no dejaron de abrazarse y llorar ni un momento.

• Sigue la investigación

La jueza Correccional Mónica Lucero investiga las circunstancias en las que se dio el incendio de la casa de los Vila. Durante la mañana de ayer, la funcionaria judicial dijo que estaba esperando las pericias de Bomberos y que eso será determinante para la investigación. A la vez comentó que estaban realizando encuestas vecinales para saber cómo son los papás de la nena fallecida. "Dispuse la intervención de un Juzgado de Familia para que se analice la situación en la que sucedió el incendio, pues se presume que los chicos estaban solos", dijo Lucero.

DATOS

• En 2018

El 2 de julio de 2018 un incendio conmocionó a San Juan, pues causó la muerte de tres personas en una vivienda ubicada en el Barrio UDAP 2, del departamento Rivadavia. Una mujer y sus dos hijos, de 8 y 15 años, fallecieron al quedar encerrados en la parte superior de la casa. Según se supo, las llamas se originaron en la planta baja y rápidamente se extendieron hacia el resto del domicilio.

• En 2019

El 25 de febrero de 2019 una casa se quemó en el interior de la Villa Muñoz, de Santa Lucía. En ese incendio murió una nena de 5 años. Una falla eléctrica dio origen a las llamas que comenzaron a propagarse rápidamente. La dueña de casa logró sacar a dos de sus hijos de 7 y 3 años, pero cuando fue por la nena de 5 años el fuego ya había avanzado y se hizo imposible rescatarla de entre las llamas.