El violento hecho sucedió ayer en la tarde en el departamento Capital. Leticia Celedón, una médica sanjuanina que trabaja actualmente en el sistema de salud provincial, tenía su auto estacionado frente a la casa que comparte con su actual pareja. A través de las cámaras de seguridad ubicadas en el frente del domicilio, pudieron detectar la presencia de la ex mujer de su pareja, quien había llegado acompañada de sus hijos de 5 y 2 años de edad. 

"Yo estaba merendando con mi familia y vistiéndome para irme a trabar. En eso llega esta mujer, que es docente y está a cargo de niños, pateó la puerta de mi casa a los gritos y comenzó a amenazarme a mí, a mi pareja y a mi pequeño hijo de tres años", comentó Celedón. 

Ante los constantes agravios, la pareja llamó al 911 para que acudiera a su domicilio. Como la policía no llegaba, la actual pareja de la médica (padre de los dos niños de la docente) decidió salir de la casa y empezar a caminar para tratar que la agresora se alejara de la casa.

"Ella hizo como que se fue y se escondió en la esquina. Yo tuve que salir a ver si se había ido y regresó. Fue ahí que siguió insultándome y comenzó a rayarme todo el auto, lo pateó y le bajó un espejo retrovisor. Fue en ese momento que me escribió el insulto que sale en las imágenes", explicó al agredida. 

Leticia explicó que no es la primera vez que recibe insultos y amenazas de parte de la docente. "Ellos tuvieron una relación de cinco años y dos hermosos hijos. Luego se distanciaron y yo conocí a mi pareja, hace siete meses estamos juntos y ella desde que se enteró me hace la vida imposible. Yo no estoy acostumbrada a esto, a las agresiones, los insultos, la persecución, las denuncias policiales. Soy una mujer que se dedica a su trabajo y a su hijo". 

Luego de la agresión recibida, la pareja realizó la correspondiente denuncia en la Comisaría Segunda y ya tomó estado judicial en el Primer Juzgado. "Mi pareja ha hecho varias denuncias en su contra, hasta una perimetral tenía, pero luego eso queda en la nada. Lo único que espero es que esta mujer desista de la agresión. Yo temo por mi vida y la de mi hijo. No entiendo cómo en el estado psicológico en el que se encuentra puede ser docente y estar a cargo de niños, es una locura", comentó la médica.