Una mujer y su hijo fueron denunciados y ahora son investigados por la presunta corrupción sexual de dos menores (sobrinos de ella, primos de él) a los que supuestamente les hacían ver material pornográfico en su casa. El sujeto además está acusado de haber abusado sexualmente de las víctimas mediante manoseos, dijeron fuentes judiciales.

Los sospechosos son dos trabajadores rurales que viven en una zona casi inhóspita de 25 de Mayo, donde se dedican a la crianza de animales. En tanto que las supuestas víctimas son un varón que actualmente tiene 14 años y su hermana, de 16.

El caso se denunció el mes pasado. El que llevó la acusación a la Justicia fue el padre de los menores, y desde entonces los pesquisas de la UFI Anivi, encargados de investigar delitos contra la integridad sexual de niños, niñas y adolescentes, comenzaron con las averiguaciones y la recolección provisoria de evidencia.

Los dos sospechosos, no identificados para proteger la integridad de los menores, fueron formalmente imputados en una causa penal. A ambos les endilgan el delito de corrupción de menores, agravado por estar encargados de la guarda de las víctimas. Mientras que al hijo de la mujer también le imputan el delito de abuso sexual agravado, precisaron las fuentes.

La madre de las presuntas víctimas falleció hace 11 años y desde entonces ellos iban seguidamente o se quedaban en la casa de su tía, la imputada. Allí es donde también tenían contacto con el hijo de la mujer. Según la denuncia, las situaciones de abuso venían desde hacía un largo tiempo, mientras que el último episodio ocurrió en diciembre pasado. La acusación indica que los hermanos eran encerrados en una habitación donde les pasaban videos porno.

Asistidos por Mario Bustos García, los dos sospechosos declararon ante el juez de Garantías Matías Parrón. Ambos dijeron que nunca hicieron eso y que se trata de una falsa denuncia motivada por las diferencias que tienen con el padre de los menores, con quien vienen con problemas porque lo habían denunciado porque golpeaba y maltrataba a sus hijos.

El fiscal Nicolás Schiattino solicitó al juez que habilite la práctica de audiencias videograbadas (Cámara Gesell), donde personal especializado podrá evaluar el testimonio de las presuntas víctimas. El magistrado concedió esa prueba y además fijó un plazo de 1 año para la investigación.

Cabe destacar que los imputados fueron citados y llegaron libres a la primera audiencia, y por ahora seguirán en libertad teniendo en cuenta que Fiscalía no pidió prisión preventiva para ellos.