Un hombre de Calingasta fue condenado a 11 años de cárcel por abusar sexualmente de su hija. El sujeto admitió su culpabilidad en un juicio abreviado en el que aceptó la pena por el delito de abuso sexual con acceso carnal reiterado agravado por el vínculo, la guarda y la situación de convivencia, dijeron fuentes judiciales.

El fiscal del caso fue Duilio Ejarque, de la UFI Anivi. Según los voceros, quedó acreditado que el padre biológico de la víctima, ahora de 15 años, la abusó desde que ella tenía 4 años y hasta los 14. 

En la denuncia consta que los abusos ocurrían en la casa donde convivía el ahora condenado con su familia, en Barreal, Calingasta. Los ataques consistieron en tocamientos por todo el cuerpo, incluidas las partes íntimas, por debajo de la ropa, lo que producía dolor en la menor. Eso, para luego accederla carnalmente por la vagina, hechos que sucedieron en reiteradas oportunidades.

El sujeto ultrajaba a su hija cuando su pareja y sus otros hijos no se encontraban en el domicilio. Mientras que a la víctima le pedía que no dijera nada y le decía que solo era un juego, y cuando ella se negaba, el padre le insistía con que siguieran jugando.

Todo esos abusos con acceso carnal ocurrieron hasta los 14 años de edad de la menor, quien en un primer momento pudo contar sobre los ataques a una amiga de 16 años y luego a una docente del colegio de Barreal al que asiste. Esa mujer, tras escuchar lo que le manifestó la alumna, decide informarle al director, quien dio intervención a una trabajadora social que fue quien el 26 de agosto del año pasado radicó la denuncia ante la UFI Anivi.

El hombre debe cumplir la pena en el Penal de Chimbas.