El próximo 6 de agosto, comenzará el juicio oral y público contra Amílcar Funes para determinar si debe o no ser condenado por noquear con un cenicero y luego asfixiar hasta la muerte al peluquero Sergio Montenegro (35) en su local de avenida De los Ríos casi Córdoba, en Caucete, durante la madrugada del 3 de junio de 2016.

El 14 de octubre de aquel año, un rastrillaje telefónico determinó que una chica tenía el celular de la víctina. En ese momento, la joven dijo haberlo recibido a manos de su novio, y éste reveló habérselo comprado a su primo, un menor (tenía 17 años) que complicó a Funes como autor del hurto del teléfono y, lo más grave, como posible homicida del peluquero.

Estos dos jóvenes, Jonathan y Esteban Torres, están siendo juzgados como partícipes del hecho. Esta mañana, la defensa pidió probation.  Ofrecen 1.500 pesos cada uno, más tareas comunitarias para zafar de una condena.  

Según el expediente, esa madrugada de junio, el boxeador insistió a Montenegro por plata para drogas y la negativa de la víctima generó una discusión que terminó en tragedia.