Los siete presos muertos el jueves tras una pelea que incluyó un incendio en una comisaría de la ciudad bonaerense de Pergamino, murieron por inhalación de monóxido de carbono y sofocación por la combustión. Así lo revelaron las autopsias realizadas a los cadáveres en la morgue judicial de Junín, informaron fuentes judiciales.


Un vocero del caso explicó que algunos cuerpos presentaban quemaduras en la cara, brazos y piernas por la gran exposición al calor, pero que ninguno tenía golpes, tal como habían denunciado familiares de las víctimas en base a algunas fotografías que circularon en redes sociales.


Los investigadores establecieron que por la quema de colchones, hubo temperaturas de 500 grados que provocaron el hundimiento de los barrotes.


Los fallecidos fueron Sergio Filiberto, Federico Perrota, Alan Córdoba, Franco Pizzarro, el colombiano John Mario Chillito Claros, Juan Carlos Cabrera y Fernando Emanuel Latorre.