Tal como lo anticipó este diario, las médicas Marcia González y Vanesa Sojo, fueron sobreseídas ayer por el juez Andrés Abelín Cottonaro, a pedido del fiscal coordinador de la UFI de Delitos Especiales, Iván Grassi, y el ayudante fiscal Mariano Carrera. Ambas estaban imputadas por el presunto homicidio culposo de Catalina Valdez Sosa (4) la pequeña que murió a causa de una hemorragia tras recibir el alta del hospital, 8 horas después de ingresar en la tarde del 7 de septiembre del año pasado. Ese día, su papá perdió el control del auto, se montó obre el bulevard de Abraham Tapia y chocó contra un poste del tendido eléctrico, metros al Norte del puente del Acceso Sur, en Capital. La conclusión de los peritos y expertos que analizaron el caso, es que la niña pudo sufrir un hematoma que no fue detectado en el hospital por estar en una zona difícil de localizar, y que pudo estallar con consecuencias irreversibles luego de recibir el alta. Como era de esperar, los abogados defensores Daniel Turón y Viviana Belén no se opusieron a la desvinculación de sus clientas. El abogado de la familia de la nena fallecida aún puede apelar.