Ernesto Eduardo Vidal Cárdenas (46) se convirtió, a última hora del domingo, en la tercera víctima mortal de los accidentes de tránsito ocurridos esa jornada. Todas las víctimas eran motociclistas: el primero de esos hechos trágicos ocurrió alrededor de las 3 del domingo en Caucete y le costó la vida a Damián González (23) un futbolista que volvía a su casa en San Martín luego de estar con su novia, cuando chocó de frente con un auto. Luego, a eso de las 7, Wilson Darío Reinoso (38) se transformó en la segundo caso trágico al protagonizar un violento choque, también frontal, con el conductor de un colectivo en Sarmiento.

El último fallecido de ese trágico domingo fue Vidal Cárdenas. Transitaba hacia el Oeste por calle Los Nogales al mando de una moto Cerro Colt 200cc, pero en el cruce con Jacarandá, en Capital (detrás del hotel Aire Andino), chocó contra un sifón de acequia y salió despedido. Según fuentes policiales, Vidal Cárdenas, al parecer, llevaba el casco puesto pero tan violenta fue su caída, que terminó perdiéndolo y con lesiones en muchas partes de su cuerpo que, al final, resultaron letales.

Destrozada quedó la rueda delantera de la moto al impactar contra la construcción de cemento del sifón.

Ayer, sus familiares y conocidos no hicieron declaraciones. Se limitaron a decir que volvía a su casa en La Bebida, en Rivadavia, que era padre de tres hijos y mantenía a su familia con su trabajo de camionero.

¿Cómo ocurrió el trágico fin del camionero? El fiscal Renato Roca y el ayudante fiscal Cristian Gerarduzzi, con el apoyo de policías y peritos intentaban desentrañar las causas del siniestro. De una primera aproximación al escenario del siniestro y sus circunstancias, sacaban una conclusión por ahora a confirmar: el chofer de camiones pudo accidentarse sin la intervención de otras personas o algún obstáculo repentino, como un perro o algún otro animal.

Sí creían que, por alguna razón hasta ayer desconocida, se desvió hasta impactar con la construcción de cemento de un sifón de acequia. Y salió violentamente despedido hasta caer pesadamente varios metros después. Esperan los resultados de la autopsia y de las pericias toxicológicas para determinar con mayor precisión la causa de muerte y determinar si acaso pudo haberse accidentado en estado de ebriedad.