Una mujer víctima de violencia de género sufrió terribles amenazas de parte de su expareja, quien hasta le dejó un mensaje intimidante en el tanque de agua.

El sujeto, identificado como Emanuel Alejandro Ezequiel Guerrero Flores, oriundo de Mendoza, fue condenado a 2 años de prisión condicional, es decir, no va preso. El imputado admitió su culpabilidad en un juicio abreviado en el que aceptó recibir ese castigo por el delito de amenazas coactivas, amenazas simples, daño y violación de domicilio. Además, le impusieron reglas de conducta como la prohibición de acercarse a menos de 80 kilómetros de la denunciante y la obligación de asistir a un taller de violencia de género.

Según fuentes judiciales, la víctima mantuvo una relación de un año, sin convivencia, con Guerrero. Hasta que ella decidió cortar porque él comenzó a tener actitudes celosas y posesivas.

Una vez terminada la relación, a principios de enero de este año, se juntaron a conversar. En esa charla, consta en la denuncia, el imputado se ofuscó, tomó su mochila y sacó un cuchillo tipo carnicero, la tomó con fuerza a la mujer, la sentó sobre su regazo, le apuntó con el cuchillo en la espalda y le expresó: "De acá no salimos vivos ninguno de los dos, este es el fin, si gritás, corrés o llorás te apuñalo".

Posteriormente, el 1 de marzo pasado, a eso de las 13.30, una de las hermanas de la denunciante vio a Guerrero con un cuchillo tipo carnicero en la mano y guantes de moto, en el fondo de su casa. Ante esa situación, ingresó al domicilio y gritó por ayuda a la denunciante, quien se encontraba durmiendo. En ese momento Guerrero intentó romper la puerta de madera de ingreso a la vivienda. Horas mas tarde, el padrastro de la víctima subió al techo y descubrió que el sujeto había estado ahí, ya que encontró colillas de cigarrillos y una inscripción en el tanque de agua que decía el nombre de la denunciante más las siglas "D.E.P.", interpretadas como "Descansa en Paz".

Días después. el 6 de marzo las 13.40 aproximadamente, cuando el padrastro de la chica salió al fondo, observó al imputado en el techo, precisamente dentro del tanque de agua. Al verlo, ingresó al domicilio y llamó al 911. Minutos mas tarde, policías lo sacaron de ese lugar y observaron que tenía consigo una "lanza tumbera", siendo esto un palo de escoba con un cuchillo encintado en su punta y unos guantes negros.