Los llantos de la bebé aumentaron la angustia. Un estruendo alteró a todos los pasajeros y al chofer de una unidad de la Línea 404 de la RedTulum, cuando transitaba por el Barrio Las Calandrias, departamento Chimbas, citó uno de los pasajeros.

Un piedrazo impactó en una de las ventanillas del colectivo y el vidrio se desgranó automáticamente. En el asiento contiguo a la ventana, viajaba una joven con su beba de aproximadamente un año de edad.

Con las primeras constataciones que fisicamente madre e hija no presentaban heridas profundas, aunque emocionalmente ambas estaban muy mal, el chofer decidió ir a radicar la denuncia a la Subcomisaría Cipolleti. Allí se llamó a una ambulancia para hacer un chequeo más exaustivo de las víctimas.

Uno de los pasajeros aseguró que este tipo de ataques vienen padeciendo desde hace tiempo en la zona oeste del departamento. "Ya no sabemos como vamos a llegar a casa", recalcó.