La vigencia de la carta magna provincial cumplió 34 años el 1 de mayo y este medio consultó a cuatro convencionales constituyentes que participaron de la reforma y que se animaron a la autocrítica. La lupa de los radicales Antonio Falcón y Mario Capello, el exdirigente bloquista y actual juez Pedro Rizo y el abogado Rubén Pontoriero, estuvo sobre el Consejo de la Magistratura, el órgano encargado de armar la terna de magistrados. En su momento fue un instituto novedoso, pero todos señalaron que hoy debería ser preponderante lo técnico en la elección de los postulantes por sobre cualquier aspecto político.

La Constitución tuvo una fuerte impronta radical, ya que los convencionales de dicho espacio político consiguieron 20 de las 30 bancas. El logro se debió al arrastre de la oleada alfonsinista de 1983, éxito que la UCR local no volvió a repetir por sí sola, salvo la participación en sociedad en el fallido gobierno de la Alianza. Por ese partido ingresaron Falcón, Capello y Pontoriero. La primera minoría quedó para el Justicialismo, que ubicó a seis integrantes, mientras que el bloquismo metió cuatro. Entre estos últimos estaba Rizo, quien hoy es juez de Paz de Albardón.

La reforma comenzó a gestarse en 1985 cuando el gobernador bloquista Leopoldo Bravo envió el proyecto de ley a la Cámara de Diputados. En las elecciones generales se eligieron a los integrantes de la Convención Constituyente y el 1 de mayo de 1986 comenzaba a regir la nueva carta magna, la primera en modificarse en las provincias tras el regreso de la democracia.

La principal autocrítica de los convencionales fue sobre el funcionamiento del Consejo de la Magistratura. Rizo dijo que "podría ser revisado porque se exige algún componente más técnico que político. Fue un avance en su momento y el transcurso del tiempo, tal vez, indicaría que hay que hacerle algún aggiornamiento, sobre todo en la selección de los jueces". A su vez, Falcón manifestó que "debe ser por un sistema de meritocracia, con exámenes escritos y orales, sin participación política y la posibilidad de opinión de la gente". En la misma línea, Pontoriero resaltó que "debería estar integrado solamente por aquellas personas que tienen que ver con el Poder Judicial para que no existan injerencias políticas". Por su parte, Capello manifestó que "debería ser por concurso de antecedentes y oposición y abierto".

Sin embargo, no fue el único punto crítico que resaltaron los convencionales. El exfuncionario del macrismo también apuntó contra el Tribunal de Cuentas, ya que dijo que "se ven actitudes laxas en cuanto al control de la legitimidad del gasto". Por su parte, Falcón agregó que los cargos del Tribunal "deberían ser electivos". Por otro lado, Pontoriero resaltó que la Fiscalía General debería ser un órgano "extrapoder", como sucede a nivel nacional.

A pesar de las observaciones, todos admitieron que se trató de una "Constitución consensuada por todos". En ese sentido, los cuatro representantes resaltaron como punto positivo la implementación de los diputados departamentales y proporcionales, ya que antes, el régimen de representación en la Legislatura no respondía a la realidad y las minorías quedaban prácticamente excluidas.

Además, calificaron como "trascendente" la consagración de la autonomía de las municipalidades. A su vez, coincidieron en que no es necesario una reforma completa de la carta magna, sino que algunos detalles se pueden complementar por la vía legislativa.

Mujer convencional
 

De las 30 bancas para los convencionales constituyentes, sólo una fue ocupada por una mujer. Se trató de Margarita Ferrá de Bartol, quien renunció antes de terminar la Convención y fue reemplazada por Hugo Echegaray. La mujer ingresó por el PJ.

Protagonistas

PEDRO RIZO - Juez de Paz de Albardón

"Otro logro importante de la reforma del "86 fue la elección del intendente de la municipalidad de la Capital. Según la Constitución del "27, era elegido en forma directa por el Gobernador. Esto resultaba anacrónico y era necesario que el jefe comunal fuera escogido por el voto de la gente".

ANTONIO FALCÓN - Abogado

"La reforma del "86 fue base de lo que iba a ser la modificación de la Constitución Nacional. Se tomaron muchísimos organismos, el Defensor del Pueblo fue uno. La Carta Magna local se cumplió parcialmente porque no han habido las independencias necesarias, la democracia participativa no apareció".

RUBÉN PONTORIERO - Abogado

"Lo más importante de la reforma es que fue la primera en las provincias. Después vinieron todas las demás y terminó con la reforma de la Constitución Nacional en el "94. Muchos de los conceptos que se vertieron en esa primera modificación fueron tomados por otras provincias".

MARIO CAPELLO - Ingeniero

"Fue una gran Constitución, que tomó mucho de los valores reinantes en ese tiempo durante la recuperación de la democracia. Generó los derechos, los poderes, el municipalismo, toda una cuestión muy armónica. San Juan pudo avanzar a partir de ella sin ningún tipo de inconvenientes".