La Cámara de Diputados aprobó ayer por unanimidad y giró al Senado un nuevo régimen para las empleadas de casas particulares que incluye vacaciones pagas, licencia por maternidad, aguinaldo e indemnización por despido.

La iniciativa, aprobada por 193 votos en el marco de la primera sesión del año de la Cámara baja, establece nuevas condiciones laborales para las empleadas que realicen tareas de limpieza pero también para quienes se dediquen al cuidado de otras personas.

Se trata de un proyecto que incluye jubilación y vacaciones para las empleadas de casas particulares. De esta manera, las empleadas de casas particulares podrán gozar de una licencia de tres meses comenzando 45 días antes del parto, mientras que el pago del salario correrá por cuenta de la Anses.

El texto establece que la jornada laboral quedará limitada a 8 horas por día y 48 horas semanales, a diferencia de la ley vigente que permite hasta 12 horas diarias de trabajo para el personal sin retiro, y no pone límites horarios al personal con retiro.

El empleador podrá establecer una distribución desigual de las 48 horas de trabajo semanales pero sin que ninguna jornada exceda las 9 horas. La norma establece además un descanso semanal mínimo de 35 horas, a partir del sábado entre las 13 y las 16. En cuanto a las vacaciones, tendrán 14 días por año que van aumentando según la antigüedad.

Las empleadas de casas particulares tendrán además la misma cantidad de días de licencia por enfermedad, el empleador deberá contratar un seguro de riesgos de trabajo y la indemnización por despido se duplicará (hoy es de un mes de sueldo por cada año de antigüedad).

La iniciativa, que prohíbe además el trabajo a menores de 16 años, se aplicará en todos los casos (hasta ahora cubre sólo a quienes trabajan más de 4 horas por día, 4 veces por semana) e incluye a niñeras y a quienes cuiden adultos o discapacitados, sin conocimientos profesionales.

El texto define al trabajo en casas particulares como "toda prestación de servicio o ejecución de tareas de limpieza, de mantenimiento y otras actividades típicas del hogar" y busca saldar "de inmediato" una deuda social "a los fines de enmendar el atraso notable en la regulación normativa de este sector laboral", de acuerdo a los fundamentos.