San Juan, 11 de marzo.- La acusación contra los dirigentes del sindicato de Municipales Antonino D´Amico y Pascual Manchineles, por cobrar sueldos y jubilaciones que no debieron cobrar, se resolvió en contra de los gremialistas.

El Tribunal Oral Federal de San Juan los condenó a 3 y 2 años de prisión en suspenso, respectivamente.

La causa es de larga data. Llegó al fuero federal el 10 de mayo del 2002, cuando la derivó el juez Guillermo Adarvez, luego de declararse incompetente por tratarse de un presunto perjuicio contra el Estado nacional. La demanda fue originalmente presentada por Horacio Vilches, un ex sindicalista municipal ya fallecido, que había sido compañero de D'Amico y Manchineles, pero que se distanció de los dirigentes y hasta su muerte los criticó.

El abogado defensor de D´Amico, Carlos Bula, declaró a Radio La Red que “es una sentencia que esta preconocida, el tribunal no ha oído a la defensa. Escucharon a una sola de las partes, a la fiscalía”.

“Fuera de plazo presentaron testigos que expresaron directamente tenerle bronca a D´Amico, que presentaron pruebas sustraídas del sindicato, robadas”, precisó. “Esas pruebas eran incorporadas a último momento, insisto, vencidos los plazos, como válida mientras a nosotros se nos rechazaba la mitad de la prueba”, aseguró.

“En este proceso hubo discriminación. La fiscalía se ocupo de probar algo que ya estaba cerrado, juzgado, que era un mero acto administrativo, como fue la devolución de la jubilación a D´Amico con los retroactivos. En ese momento, nadie apeló ni se opuso. La ANSES misma no denunció un perjuicio, pero ellos (por la fiscalía) trataron de probar que si”, concluyó.