En el partido bloquista volvieron a reunirse y el encuentro fue un hervidero, dado que hubo una andanada de duros pases de factura hacia la presidente Graciela Caselles. Las críticas más fuertes de autoridades partidarias y dirigentes apuntaron a que la titular de la fuerza política viene fogoneando por atrás la ruptura con el frente oficialista, que lidera el peronista Sergio Uñac, y que está jugando en contra de la candidatura de Luis Rueda, mandamás de la Convención, que aspira a llegar a la cúpula del Comité Central. Caselles señaló que tales versiones son mentiras, que siempre respaldó al Gobernador y que "en su momento, cuando dije que podía ser Luis (su sucesor), empezó una campaña de destrucción".

La reunión puso de nuevo sobre la vidriera el malestar del sector ligado a Rueda contra Caselles, quien, ante la consulta de este medio sobre el acuerdo que tenían ambos, manifestó que "lo voy a apoyar a él y a todos los que quieran ser candidatos para que se encuentren en la unidad". Además, indicó que "por lo que observo, en este momento hay interna si se dispara el calendario" y que "me parece que (Pedro) Medina ya es candidato". Una de las críticas que venía teniendo la titular de la fuerza es que, justamente, venía impulsando subterráneamente al exministro de Salud, pero insistió en que "es un invento", aunque aclaró que "a nadie le voy a impedir que quiera ser candidato".

Uno de los puntos tensos de la reunión se dio cuando el concejal pocitano Mario Gaitán contó que su colega Belén Barboza, del PRO, le confesó que la había llamado Caselles para que trabajaran en conjunto contra él y para pegarle a Rueda y al Gobernador. A su vez, el vice de la Convención y dirigente de Santa Lucía, Rubén Giménez, también destacó que autoridades del Comité de ese departamento vienen asegurando que la presidente está promoviendo la ruptura con el frente oficialista. Ante ambos comentarios, la titular de la fuerza dijo que son mentiras.

No fueron los únicos momentos calientes, ya que otro momento de máxima tensión se dio cuando un exdelegado de Albardón, José Luis Hidalgo, relató que una persona cercana a Caselles le ofreció 20 mil pesos para "hablar mal" de Rueda y su ladero, el diputado provincial Andrés Chanampa. Este hombre se encontraba presente y se acercó ofuscado e intimidantemente hacia Hidalgo para recriminarle el comentario, pero todo fue frenado por las autoridades y la cosa no pasó a mayores.

Por su parte, Rueda lanzó tiros por elevación contra la presidente y su sector, dado que señaló que "las mezquindades están llevando a las divisiones" y que "en mi propio partido me han ninguneado". Inclusive, le apuntó a una asesora de Caselles, a quien le endilgó el manejo de perfiles de Facebook para perjudicarlo.

La presidente también recibió cuestionamientos, aunque con tonos más medidos, de Chanampa, Alejandro Bravo, el diputado Edgardo Sancassani y Laura Adámoli por no abrir el partido a diversas discusiones, entre otros puntos.