"Me da mucha lástima y mucha pena. Pero hay que aguantársela, porque lo hace como militante político, qué se le va a hacer...". La frase, contundente, es de José Luis Gioja, consultado ayer por DIARIO DE CUYO sobre qué sentimiento le genera ver a César Gioja en ronda de críticas hacia él por medios nacionales, en medio de la disputa familiar por la re-reelección.

El gobernador le dijo a su hermano mayor que si quiere hablar con él, "que pida una audiencia y venga", mostrando la lejanía que los tiene sin dirigirse la palabra desde que se anunció la enmienda constitucional, el 11 de marzo último, lo que provocó una ácida reacción del senador, anotado en la carrera por la Gobernación, en declaraciones a medios nacionales y en su cuenta de Twitter.

El gobernador dijo, contrariando lo que expresó César, de que no quieren recibirlo, que "cuando él quiera que venga, él ha venido todas las veces que ha querido y yo lo he recibido".

Las últimas declaraciones polémicas se vieron en la edición dominical del diario La Nación. Allí, César compara al gobernador con dictadores como Kadafi y Mubarak y afirma que "José es constructor, le encanta la obra pública: hizo 50 escuelas, pero no mejoró la educación; hizo unos hospitales bárbaros, pero no mejoró la salud".

Consultado por este diario, ayer en rueda de prensa, el mandatario le contestó a su hermano diciendo que "es probable, puede ser cierto, pero es importante que se hagan muchas escuelas y muchos hospitales porque usted debe tener la imagen de lo que era la Maternidad del Hospital Rawson y uno ve ahora un cambio que es para bien". Agregó, en la misma línea: "que nos puede faltar, es probable, pero yo acepto que hemos avanzado y mucho. Yo he visto casos de escuelas especiales que iban 30 alumnos porque funcionaban en un galpón, y cuando hemos hecho una escuela nueva, van 150, que es para bien. Que nos falta, es probable, que hemos avanzado y que vamos mejorando, no lo puede negar nadie".

José Luis Gioja siguió retrucando a su hermano diciendo que "vamos a escuchar sus críticas como escuchamos todas las críticas que nos hacen de todos lados. El sabe que tiene las puertas abiertas. Ahora, en vez de decir en un medio nacional, venga a decirlo acá".

En distinta actitud que días atrás, cuando se mostraba reacio a tocar el tema, el gobernador ayer se paró un buen rato a hablar con la prensa sobre César. Hasta analizó el papel de su hermano entre los opositores: "va a depender de él y de la oposición si le da lugar. Es un problema de ellos". Agregó que "yo de lo que tengo que opinar y decirle a los sanjuaninos, que me conocen, es que no vengo con el cuchillo debajo del poncho, no tenemos ninguna otra decisión u objetivo que trabajar por lo que más queremos que es San Juan. Y sabemos que hay algunas ventanas que están abiertas y que hay que cerrar".

También el gobernador se refirió a la publicación de La Nación donde él dice, cuando le consultan por qué se identifica a los Gioja con Barrick, que es porque "César es proveedor" de la minera. "No lo he dicho yo a eso, creo que hay una mala fe de alguien. Si lo he dicho, lo he dicho en off, en público no lo digo porque realmente no me interesa para nada si es o no es. Y si está, yo lo desmiento, porque si lo he dicho, fue en off (fuera de micrófono en la entrevista) ante una pregunta".

Al final, el gobernador fue enfático al opinar que "me parece muy bajo reducir esto a un problema que tiene que ver con quien habla y otro dirigente político. A mí me parece que el problema es mucho más amplio, nunca ha habido una promesa para nadie, siempre hemos dicho que había que ser prudentes (...) Lo mejor será lo que elija la gente el 14 de agosto".