Una empleada de Obras Sanitarias Sociedad del Estado (OSSE) denunció haber sido víctima de acoso sexual por parte de un superior jerárquico. Quien estaría en la mira es Leonardo Javier Andrada Doblas, actual jefe del área de Legales, según indicaron fuentes que tienen conocimiento de la causa. La presentación la hizo en juzgado de turno, el Primero Laboral, a cargo de Matías Pallito, quien ordenó que se lleve adelante una cautelar, la cual consistió en la imposición de distanciamiento entre el profesional y la denunciante. Para que se cumpla la medida, ordenó que se dispongan dos horarios de trabajo distintos para que los involucrados no se encuentren. Además, el magistrado estableció que cesen las presuntas agresiones, tanto directas como indirectas, del acusado contra la víctima. En la denuncia, la mujer pidió, como planteo de fondo, que dicha autoridad sea desafectada de su puesto de trabajo, esto es, que sea despedido. Una vez abierta la investigación, cada una de las partes deberá ofrecer las pruebas correspondientes y el imputado podrá ejercer su derecho de defensa.

Sobre la causa en particular, no trascendieron los hechos puntuales que derivaron en la denuncia, aunque las fuentes consultadas indicaron que la presunta situación de acoso llevaría algún tiempo, al punto que, al parecer, la denunciante habría hecho el reclamo administrativo correspondiente en la repartición, pero no tuvo respuestas. Ante la falta de solución, la mujer decidió recurrir a la Justicia. Por otro lado, un punto no menor es que, si bien los involucrados son empleados que cumplen funciones jerárquicas en OSSE, Andrada Doblas tiene un rol superior al de la mujer, por lo que estaría en una situación de poder.

Según indicaron las fuentes, en Tribunales no hay antecedentes recientes de casos de acoso sexual en el ámbito de la administración pública y, en particular, dentro de una empresa estatal como OSSE. La denuncia está enmarcada dentro de la ley de violencia laboral, norma que contempla tres tipos de violencia: maltrato físico, acoso psicológico y acoso sexual. Este último apartado está definido como "cualquier tipo de acercamiento o presión de naturaleza sexual, tanto física como verbal, para sí o para un tercero, no deseada por quien la sufre, que surge de la relación de empleo público y que da por resultado un ambiente de trabajo hostil, un impedimento para hacer las tareas y/o un condicionamiento de las oportunidades de ocupación de la víctima".

Un caso resonante entre miembros de la administración fue el del excomisario Isidro Ponce, que fue condenado por abusar sexualmente de una compañera de trabajo, hecho que se produjo fuera del ámbito laboral. Incluso, la Corte de Justicia confirmó la condena (Ver abajo).

  • La causa Ponce

El 29 de mayo de 2018, el excomisario General Isidro Antonio Ponce fue condenado a 4 años y 6 meses de prisión por el abuso sexual gravemente ultrajante cometido contra una agente que estaba a su mando. El hecho ocurrió en septiembre de 2011, cuando la mujer perdía el colectivo al salir de su trabajo en el Centro de Operaciones (hoy Cisem 911) y su jefe, Ponce, se ofreció a llevarla a su casa en un departamento alejado. Antes de llegar, el jefe policial paró para orinar y, a su regreso, se abalanzó sobre ella, intentó besarla, la manoseó y le metió los dedos en sus genitales.