-¿Qué opina de la detención del "Momo" Venegas?

-Primero nos preocupó, porque nos parecía que era una acción politizada y la sensación de que se puede meter presos a los opositores por ser opositores es muy preocupante. No lo podíamos afirmar, pero después se fue consolidando con el correr de las horas. Hoy (por ayer) se publicó en un diario nacional que gente del Gobierno le había ordenado a Oyarbide tomar la declaración ayer en lugar de hoy, como había dicho él que iba a hacer, lo cual es muy preocupante, porque eso pasó. Después, el fiscal de la causa dijo que era una barbaridad que estuviera preso Venegas y pidió su excarcelación. Y finalmente el juez lo largó después de haberlo mostrado, haciéndolo recorrer comisarías con esposas y rodeado de policías, como si fuera un terrorista internacional, y resulta que al día siguiente estaba en su casa. No nos sorprende. Yo tengo un pedido de juicio político contra Oyarbide por el caso de Macri.

-¿Entienden que es un juez que responde al poder político?

-Sale en los diarios que lo llaman del Gobierno para que haga esto, para que haga lo otro, así es que la verdad es muy preocupante.

-¿Hay una intervención del Ejecutivo en el Poder Judicial?

-Sí, a mí no me caben dudas. Creo que lo hemos visto en un par de casos. Yo lo he visto en un caso directo que fue en las acciones judiciales que hicimos para defender las reservas del Banco Central el año pasado. Había una jueza independiente que hizo lo que tenía que hacer, nos dio la razón a nosotros, y el Gobierno le mandó un patrullero para que la siga. Después, hizo lo posible para que interviniera una Cámara y no otra, lo cual es una mala señal, y terminó el episodio denunciándome penalmente a mí de un delito que el juez que intervino lo terminó sacando zapateando enseguida. Esta fue la actuación del Gobierno en una parte de la Justicia. Después está la Justicia Penal, que es la que estamos viendo ahora, ya vimos lo de Macri, que a mí criterio me avergüenza. La prisión del Fino Palacios, al final la Cámara dijo que la detención era ilegal. La verdad, es preocupante, pero como que uno se le va haciendo el cuero duro. Lo malo es que nos vamos acostumbrando a esta barbaridad.

-¿Michetti o Rodríguez Larreta como candidato en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires? -Yo soy neutral, porque tengo una buena relación con los dos. Estoy casi seguro que se van a poner de acuerdo ellos y Mauricio Macri para hacer la propuesta que sea más representativa de los porteños. Quien tenga más posibilidades de ganar una elección, porque representa a más gente. Pero si no fuera así, hasta se puede pensar en una elección para definirlo. No es malo que haya varios candidatos, no dramatizo en absoluto. Hay gente que cree que la interna es terrible porque hay pelea, yo creo que no hay motivos para pelearse. Cada uno tiene que hacer su propuesta y el que gana debe ser apoyado por los demás.

-¿Cómo está el proyecto presidencial de Macri?

-Yo creo que bien, lo veo muy convencido de trabajar para su candidatura. Desde el lado del PRO, lo que nosotros hacemos es ofrecer la candidatura a potenciales aliados nuestros, especialmente al Peronismo Federal.

-¿Es posible el acuerdo con el Peronismo Federal?

-Lo estamos buscando, es una experiencia que ya hicimos en Buenos Aires y en San Juan. El acuerdo con Felipe Solá y con Francisco De Narváez nos permitió ganarle la elección a Kirchner y a Scioli juntos. Me parece que eso es lo que hay que replicar en el orden nacional.

-¿Cómo ve el panorama político en San Juan?

-Me parece que se está conformando un frente electoral competitivo, que ojalá que prospere y que agrupe a lo que fue Unión por San Juan y otros sectores más. Sé que hay diálogo con gente como Colombo y Basualdo estuvo en el frente la vez pasada. Espero que podamos generar una alternativa con generosidad y con grandeza para poder disputar por la provincia.

-¿Qué pasa en el PRO San Juan? ¿Ustedes apoyan a la conducción de Ramírez o a Acosta Zapata?

-La conducción es la conducción, el partido está conducido por sus autoridades legítimas, no cabe ninguna duda. Mi presencia acá lo que busca es mantener un vínculo viejo que tenemos con aliados políticos importantes como Basualdo o Mauricio Ibarra.

-Entre ellos dos, ¿apoyan a Ibarra o a Basualdo?

-(Risas) No, no, eso lo van a resolver los sanjuaninos, no los porteños. Lo que tenemos que hacer los porteños es dar una mano para que haya unidad, una fuerza competitiva y comprometer el pequeño apoyo nuestro para que se pueda competir mejor. Pero las decisiones las tienen que tomar los sanjuaninos.

-Gioja está analizando enmendar la Constitución para ir por un nuevo mandato. ¿Cómo lo ven ustedes?

-Que no se puede. Lo que necesita la Argentina es lo contrario, es que en la próxima gestión de gobierno empecemos a respetar la leyes. Porque si no, la verdad que hoy no las respetás porque no te conviene en la política y mañana te matan a tu hijo en la esquina. La inseguridad es eso, si vos no respetás la ley, después los delincuentes tampoco la respetan en la esquina de tu casa y te matan a los hijos. Así que tenemos que parar la pelota esa. El Flaco Gioja, a quien aprecio en lo personal, tiene una gran oportunidad de seguir su carrera como candidato a vice, de esa manera se evitaría violar la Constitución, lo cual sería doblemente beneficioso para él.

-¿Cree que ese plan no funcionó?

-Bueno, no sé. Debería pelear para que funcione. Lo único malo es que le vamos a ganar también la Presidencia (Risas).

-¿Van a impulsar la boleta única para octubre?

-Sí, nos gustaría. Lamentablemente el año pasado tendríamos que haber votado eso en Diputados, que era un proyecto de casi todos, menos el oficialismo, pero fueron tantas las urgencias que hubo, como el 82 por ciento móvil, los superpoderes, los decretos de necesidad y urgencia, el Consejo de la Magistratura, que no pudimos aprobarlo. Espero que se apruebe, pero tiene que aprobarse muy rápido, si no no se va a poder aplicar este año.

-¿Qué ventajas tiene la boleta única?

-La primera ventaja es que no te pueden robar las boletas. Cuando le gente quiere ir a votar tiene todo en un solo papel, todos los partidos, y eso implica un ahorro importante de impresión de boletas, implica la garantía de que cualquiera puede votar por el que quiere y no que no pueda votar porque le afanaron las boletas. También mejora mucho la fiscalización, no hace falta tener un ejército de fiscales para poder reflejar la voluntad popular.

-Leí una crítica suya por la demora en la aplicación de la Ley de Glaciares...

-Sí, pero es genérica mi queja. Yo tuve una postura distinta al Gobierno en la Ley de Glaciares en un punto, pero lo apoyamos en casi todo lo demás. Lo que no puede decir la presidenta es si ella va a aplicar o no una ley. Si la ley es ley, la tiene que aplicar. Entonces, la falta de reglamentación no es una opción que tenga la presidenta. Ella tiene que hacer lo que la ley le dice que haga, en este caso hacer un inventario de los glaciares a proteger. Lo tiene que cumplir.

-¿Cómo ve el gobierno de Cristina y cómo incidió la muerte de Kirchner?

-La muerte de Kirchner incidió de una manera importantísima, que no la ve el público. Pero cuando uno mira la gestión de gobierno, uno ve que cada cosa que se hace funciona mal. Y vemos que no hay una conducción centralizada, no hay una política única, no hay una estrategia firme. La discusión que hay sobre las colectoras en la provincia de Buenos Aires es un ejemplo chiquito de eso, como habrá distintos grupos que discuten entre ellos sin una conducción que los unifique y eso se refleja en el Gobierno, que hace muchos disparates. El Gobierno manda a sus policías a hacer un curso en un país de Latinoamérica y el canciller del Gobierno dice que es un curso para enseñar a torturar. La verdad es que es medio caótico todo esto.