Buenos Aires, 8 de febrero.- Prácticamente se convirtió en una actriz abocada al cine, y por suerte, los proyectos le sobran, ya que comenzó con el rodaje de la primera película del año, y todavía, le faltan tres más.

En el restaurante Chi-Cha de Las Cañitas, se realizó la presentación de la película Infancia Clandestina con Natalia Oreiro, Cesar Troncoso ( el actor uruguayo ) y Ernesto Alterio, con la direccion de Benjamín Ávila.

“Todavía no está definido el título, porque también está Maní con chocolate, que es el que más me gusta”, dijo la actriz a Teleshow.com.

De muy buen humor y con mucho entusiasmo en concretar este proyecto, Natalia se divierte con las diversidad de personajes que puede interpretar en cine, y si bien, asegura que le encanta la ficción, por ahora no tiene lugar en la agenda.

“No descarto hacer tele, siempre lo hice y me gusta mucho, pero surgieron estas propuestas, así que veremos que pasa el año que viene”, explicó.

La ex Muñeca brava se mostró muy contenta con la oferta que brinda la televisión en cuanto a las ficciones, y se define como una espectadora más: “Me encanta que exista la posibilidad de elegir, porque acá el que sale ganando es el espectador. El año pasado me enganché con Para vestir santos, y este año depende el tiempo que tenga, seguramente mire alguna otra”, dijo.

Eso sí, parece que no es muy fan de los realities porque no le atraen, aunque le parece bien que haya espacio para todos.

Mientras tanto disfruta de su presente, y entre tantos planes, siempre destaca el de ser mamá: “Claro que me gustaría, pero veremos cuando”.

Para el mes de marzo, la esperan los rodajes de Mi Primera Boda con Daniel Hendler, Wakolda de Lucía Puenzo con Diego Peretti, y la película Mala de Caetano.

Sinopsis de Infancia clandestina

La misma sucede en la bisagra de la historia de un país. La argentina en 1979 y cuenta la historia de Juan, un niño de 12 años, y su familia. Es una historia de militancias, de clandestinidad y de amores.

Donde los deseos se pueden convertir en realidad y también pueden desaparecer. Donde se puede ser feliz y también desdichado.

Juan está clandestino, tiene otro nombre al igual que toda su familia: Su mamá Charo (Natalia Oreiro), su papá Daniel (Cesar Troncoso) y su adorado Tío Beto (Ernesto Alterio).

Juan se llama Ernesto. En el barrio y en la escuela lo conocen así. Pero en su casa es simplemente Juan. Estos dos mundo, Juan y Ernesto, conviven, colisionan y se retro-alimentan hasta un punto en que Juan no podrá sostenerlo más y querrá comenzar su propia clandestinidad con su gran amor que es María, una niña que conoce en la escuela.

¿Acaso el amor y la fe en lo posible podrá cumplir los deseos de Juan y su familia? ¿Acaso los “Sueños de Juventud” podrán dejar su semilla?