Un medicamento de venta popular en nuestro país está involucrado en un escándalo judicial dentro de los Estados Unidos y está acusado de causar cientos de muertes en ese país. La compañía que produce el OxyContin afronta una demanda por parte de quienes acusan que ese analgésico produce adicción y le costó la vida a un centenar de personas en ese país.

En los EE.UU afirman que el país afronta “la peor crisis por drogas en la historia del país” y ya se registraron más de 500 ciudades, condados y tribus de nativos americanos que presentaron una demanda que indica que los miembros de la familia Sackler, los propietarios y máximos responsables de Purdue Pharma, por la producción de este fármaco.

La iniciativa judicial está desparramada en más de la mitad de los estados de EE.UU. En total figuran 26 condados de los 50 del país que lidera Donald Trump y a diferencia de otras demandas, aquí se acusa directamente contra los propietarios de la compañía.

Los Sackler están acusados de proliferar una epidemia dentro de los Estados Unidos y de vulnerar la legislación para enriquecerse mientras aproximadamente 90 personas mueren por día a causa de este problema.

“Ocho integrantes de una sola familia hicieron la opción de elegir aquello que ha contribuido a la epidemia del opio”, que se presentó esta semana dentro del Tribunal Federal del distrito sur de Nueva York. “Esta nación encara una adicción sin precedentes a los opiáceos que fue iniciada y perpetuada por esta familia”, agrega la demanda.

Los Sackler amasaron su fortuna a partir de Purdue Pharma, empresa que no cotiza en bolsa, y son conocidos por realizar donaciones en diferentes entidades de los Estados Unidos. Sin embargo, a partir de esta situación, museos como el Guggenheim decidieron devolver el dinero que habían recibido.