El bichito de la actuación le picó cuando era adolescente. "El destino sabe por qué fue que no lo quiso antes", recuerda esta docente de hipoacúsicos que ya goza de su jubilación.

"Gracias al teatro hasta tuve que aprender a coser para ayudar a hacer el vestuario", explica quien hasta llegó a involucrarse en tres obras a la vez, como en 2009, con Los Cuentos de Fontanarrosa, María Estuardo y Antígona Vélez.

Ella es soltera, vive con su hermana menor y tiene 66 años. Tras su tiempo en Candilejas, hace tres años es parte del grupo universitario DeLa Nuca que dirige Rosita Yunes y con el que sube a escena con Ab-Zurdo.