El mediodía de ayer no fue igual al resto de los días de esta cuarentena. Es que sumada a la angustia que se vive día a día con el crecimiento de la crisis sanitaria, el paro de colectivos hizo que muchas personas se vieran afectadas cuando salieron de sus trabajos, por ejemplo, debido a que no tenían en qué volver a sus casas. Esta angustia y la bronca de algunos que debieron gastar dinero extra para pagar un remís hizo que muchas personas no pudieran disimular la cara de desconcierto. El paro duró casi 4 horas, 20 menos de las que estaban previstas en un primer momento, sin embargo hubo mucho enojo de parte de los pasajeros y del gobierno local.

"Estuve tres horas haciendo fila para pagar los impuestos y no podía abandonar mi lugar para tomarme el colectivo y volver en otro momento", dijo Ramona Gutiérrez, de Chimbas. Al igual que ella, otras mujeres no podían contener la bronca y dijeron que iban a gastar lo poco que les había quedado, luego de pagar la luz, el gas y el agua, para poder viajar en un remís. Si bien muchos comentaron que sabían de esta medida, otros se enteraron cuando alguien pasaba por las paradas y les avisaba. Es por esto que las esquinas estuvieron minadas de remises y taxis, que a pesar de que no está permitido, recorrieron las calles tratando de levantar pasajeros. "Estamos esperando que el señor -por un taxista- nos averigüe cuánto cuesta el remís hasta mi casa porque no sabemos si nos alcance. Ya hubo varios que nos pasaron sus tarifas aproximadas y estamos viendo si conseguimos algunos más barato", explicó Sandra Castro, de Rawson, mientras que un señor que estaba al lado de ellas dijo que él se estaba por subir a un taxi e iba a viajar hasta donde la plata se lo permitiera. Esta situación se repitió en varios sectores de la provincia, pero sobre todo se vio en el microcentro, donde hubo largas filas nuevamente.

El paro, que se había aplicado "en solidaridad" con choferes de otras provincias que sufren atraso salarial, se levantó algunos minutos antes de las 16 y la ministra de Gobierno, Fabiola Aubone, lo calificó de "injusto". La ministra consideró que "las empresas están al día con los sueldos y tienen garantizado el pago de los meses venideros. Tienen garantizado el pago con un montón de cosas, pero si se quedan sólo con el subsidio del gobierno -es decir sin la recaudación por la baja cantidad de pasajeros- también tienen garantizado el cumplimiento de la grilla salarial". Por su parte, desde el gremio de choferes UTA, Héctor Maldonado informó que luego de reuniones mantenidas con el gobernador Sergio Uñac y con la ministra Aubone decidieron levantar la medida.

Protagonistas

EMILCE BALMACEDA - Vecina de Chimbas

"Vine al centro pagar algunas boletas y no sabía del paro. Ahora estoy pensando en qué irme a mi casa, porque un remís me costará como 400 pesos y es un gasto muy grande".

JORGE RUBILAR - Vecino de Rawson

"Vine a Energía San Juan a pedir una prórroga para que no me corten la luz porque no tengo cómo pagarla, porque no recibo mi dinero. No me quedaba otra y ahora no sé qué hacer".

SERGIO CASTRO- Vecino de Capital

"Vine a que me hagan curaciones en el Hospital Rawson y no sabía del paro de colectivos. Ahora creo que me voy a ir caminando, pero vivo a unas de 30 cuadras de acá".