Días antes del show que sobrepasó la capacidad del predio, de la avalancha trágica, de las dos muertes y de la interminable desconcentración de Olavarría, los hoy imputados Matías y Marcos Peuscovich negociaron cómo y dónde se vendería la cerveza en el show del Indio Solari. Todo ante la atenta mirada del intendente Ezequiel Galli.

"Corazón, vos nunca armaste una cantina atrás de un escenario y yo hace 20 años que hago shows". Con esas palabras, uno de los titulares de la productora En Vivo S.A. intenta persuadir a uno de los vendedores sobre el mejor lugar para montar el stand. La discusión se fue poniendo cada vez más caldeada. Gritos de un lado y del otro.

Los vendedores aseguraban que habían mantenido reuniones previas en donde se había hablado que "todo estaría abierto". Pero los Peuscovich se negaban a instalar puestos detrás del escenario porque, según sus propias palabras, en ningún show del mundo se venden productos allí. "Yo te abro ahí, no tengo ningún problema. Pero es un lugar que no tiene comunicación con el público", agrega uno de los hermanos organizadores del show.

El momento más tenso se produce al final del video cuando el representante de En Vivo S.A. le dice de manera grosera que si no le importara la ubicación de los puntos de venta el no tendría problema en abrirle esa calle. En un tono claro de enojo, una de las mujeres sostiene que lo iba a hablar con el intendente por él le había asegurado que sería así.

El video se conoce un día después de que Galli declarara que no era responsable por lo sucedido y deslindara todo en los productores del recital.