Los viajes de egresados siguen postergados y eso preocupa, pues hay empresarios esperando que esto se habilite y en San Juan hay más de 300 chicos ansiosos de poder realizar su viaje. En este contexto, desde la Asociación de Agencias de Viajes y Turismo dijeron que pese a no tener certezas de fechas ni de la modalidad que tendrán, los contratos siguen en pie. Vittorio Vatteroni, que es el dueño de la única empresa local que produce estos viajes y que además integra la Asociación, dijo que las agencias no viven una buena situación y que desde hace unos 5 meses no recibieron más pagos de parte de los padres que contrataron el servicio. 


Incertidumbre y angustia son las dos palabras que más usan en el ambiente del turismo estudiantil para definir la situación. Es que, al igual que en el resto del país, están esperando que las fronteras se abran y se pueda volver a hacer turismo. "Estamos a la espera de saber qué pasa. No hicimos cancelaciones de contratos ni devoluciones. Eso es algo complejo porque nosotros ya tenemos todos los servicios pagos para los viajes que debíamos hacer este año. Entonces dependemos de nuestros proveedores para ver que nos devuelvan esos fondos, pero eso es imposible", dijo Vatteroni y comentó que los viajes de egresados están cerca de los 100.000 pesos. Es decir que se está hablando de un negocio local de más de 30 millones de pesos que está en veremos y lleno de dudas, pues se había firmado más de 300 contratos para este año. 


Si bien, según lo que dijo Vatteroni, a nivel nacional se maneja la información de que en octubre podrían volver las clases y que 30 días después se los habilitaría para hacer los viajes estudiantiles, dijo que esa información habría que tomarla con pinzas. "Suponiendo que nos habilitan, aún no sabemos cómo podremos hacerlo. Es decir, si podemos llegar a Bariloche y no habilitan los boliches, por ejemplo, el viaje no será igual. Qué joven quiere viajar con sus compañeros y no salir a bailar. Ante esa situación, analizaremos qué hacer", agregó el empresario que es gerente de Turismo Vittorio y comentó que en San Juan hay 4 agencias más que se ven afectadas por la falta de turismo estudiantil, pues son las que se dedican a revender paquetes. Además, comentó que otra cosa que podría complicar los viajes es saber si en las escuelas dejarán a los chicos que falten a clases, debido a la cantidad de días sin presencialidad. Y, en el caso de que las clases se retomen recién en 2021, no saben qué pasará con los estudiantes que ingresarán a las universidades. 


Luego de reiterar que los contratos siguen en pie, y decir que si mañana se habilita el turismo las agencias ya tienen todo pagado para llevar a los chicos a Bariloche, Vatteroni comentó que los papás dejaron de pagar los viajes hace al menos 5 meses. "Hicimos muchos llamados para cobrar las deudas, pero no recibimos buenas respuestas. Lo que nos contestaron es que no podían cumplir y que si era necesario iban a dar la baja al contrato. Entonces optamos por no llamar más, porque nosotros esos viajes ya los tenemos pagados -es decir ya pagaron a proveedores de hospedajes, boliches y excursiones- hace mucho, porque trabajamos de un año para otro", explicó el empresario y dijo que los precios están congelados porque la mayoría de los padres ya pagó más del 50% de los viajes, pero que ahora a ellos les resulta muy complejo poder sostener las agencias. "Nosotros vamos a seguir y los viajes los vamos a hacer, pero nuestra situación es más que crítica", concluyó.

 

Desolación total en Bariloche

Septiembre es uno de los meses en los que Bariloche tiene la mayor cantidad de movimiento por los viajes estudiantiles. Actualmente los puntos turísticos de este destino están desolados y eso no sólo preocupa a los dueños de agencias de viajes, sino a los comerciantes en general. Es que el turismo estudiantil moviliza a unos 150 mil jóvenes del país, que gastan unos 11.000 millones de pesos en más de 20 destinos nacionales (Bariloche es el más visitado) y 3 del exterior, según la Asociación de Turismo Estudiantil de San Carlos de Bariloche (Atesa).