Luego de que empleados de la firma Mapal quedaran aprisionados por un derrumbe originado en el interior de una obra de cloacas de unos cuatro metros de profundidad, compañeros de trabajo no dudaron en afirmar que se trató de una "desgracia con suerte".

"Gracias a Dios que la tierra no los ha tapado por completo. Ellos están bien, tenían las piernas lastimadas no más", agregaron.  

Todo ocurrió hoy en horas del mediodía cuando los hombres se encontraban trabajando en el interior de la obra ubicada sobre Calle 12, a la altura de David Chávez del Barrio Joaquín Uñac, en Pocito. Al parecer, la tierra seca ocasionó el derrumbe de las paredes laterales y los aprisionó. 

Ambos pudieron ser socorridos y sólo sufrieron traumatismos en sus piernas.