Por segunda vez en más de dos semanas, los temporales de lluvias afectaron seriamente a los vecinos de Barreal, en el departamento Calingasta. Según el testimonio de funcionarios y vecinos de la zona, el agua que bajaba desde los cerros corrió con fuerza por las calles principales de Barreal, lo que ocasionó daños en las estructuras de al menos 30 viviendas. El intendente, Jorge Castañeda; el ministro de Desarrollo Social, Fabián Aballay; y el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, recorrieron el paraje turístico calingastino, hablaron con algunos vecinos, y prometieron unos 20 millones de pesos en asistencia social y "una solución de fondo", como aclaró el mandatario provincial, con obras en la precordillera que ayuden a evitar que la escena se repita.

En la tarde del 10 de febrero de este año se registró el primer gran llamado de atención por la violenta bajada de agua desde los cerros barrealinos. Según se informó en ese momento, inicialmente el agua generó inconvenientes en el tránsito en la Ruta 149, principalmente en las zonas de la Pampa El Leoncito y el límite con Mendoza. Desde allí la crecida llegó con fuerza hasta Barreal y el alud de barro y material de arrastre se adueñó de la avenida Presidente Roca, pero a pesar de la espectacularidad de las imágenes que enviaron los vecinos, las autoridades no debieron socorrer a ninguna persona.

En esta oportunidad, el problema fue más grave y sí hubo afectación. El agua bajó pasadas las 18 del jueves y ganó la avenida Roca, principal arteria de Barreal. También inhabilitó las calles Belgrano, San Martín, Los Sauzales y algunas otras arterias internas del barrio Cerro Colorado. Según coincidían algunos testimonios en redes sociales, "hacía años que no se veía nada parecido". Ante la gravedad de lo ocurrido el ministro Aballay confirmó que el fenómeno los obligó a evacuar a 3 familias; además de asistir a los residentes de unas 30 viviendas que presentaban "deterioro considerable. El daño llega al 70 u 80% de la estructura", agregó. Según el funcionario, las tres familias que tuvieron que trasladar viven en una casa que está al final de una calle, en un bajo. "La vivienda difícilmente se pueda recuperar", graficó el funcionario.

En horas de la tarde de ayer, el Gobierno provincial comunicó que se habían realizado tareas de mantenimiento, por parte de Vialidad Provincial, de las arterias dañadas desde la "noche del jueves y se prolongó hasta la madrugada del viernes. Durante la mañana del viernes se continuó con el retiro de material de arrastre y relleno en banquinas, para restituir los caminos a su estado normal", comunicaron.

Una vez socorridas las familias e iniciadas las tareas de mantenimiento de las calles, el intendente Castañeda explicó que "le pedimos al Gobernador que nos ayude también con las soluciones definitivas". Según el funcionario, hay que hacer un estudio que determine cuál es la mejor estrategia de ingeniería para evitar que el agua de lluvia que cae sobre "las quebradas de río Seco, en la precordillera, termine en el centro de Barreal". El jefe comunal aseguró que esas obras pueden ser "conductores de agua, cortaderas o canales", dependiendo de la zona que se estudie. "Los vecinos quieren que se hagan canales y han presentado un proyecto a tal fin, hay que estudiarlo y hacer lo mejor. Lo que no podemos hacer es tratar de contener el agua, porque eso a la larga nos va acarrear problemas nuevamente", aseguró el funcionario. Uñac se comunicó desde Barreal con el ministro de Obras Públicas, Julio Ortiz Andino, para que inicie los estudios. Según las primeras estimaciones, la obra sobre la precordillera debería cubrir unos 16 kilómetros al menos, para lograr que el líquido y el material de arrastre no desborden llegando a las calles principales de la localidad turística calingastina.

Por su parte, Aballay confirmó que aportarán 20 millones de pesos para ayudar a las personas damnificadas. La asistencia también incluye colchones y otros elementos. En el mismo sentido, desde el Municipio se comprometieron a ayudar con personal para apuntalar las estructuras que han quedado dañadas. También asistieron con mercaderías y otros elementos, aseguraron fuentes del Gobierno provincial.

Por la noche de ayer algunos lectores indicaban que habían sufrido problemas con el abastecimiento de agua potable y las autoridades provinciales confirmaron que efectivamente algunos vecinos sufrieron el corte del servicio y que en otros sitios salía barro de las canillas. Al cierre de esta edición, trabajadores de Obras Sanitarias trabajaban en la zona para normalizar el servicio. Las autoridades no supieron confirmar cuántos usuarios tenían inconvenientes.

Precordillera
16  Son los kilómetros que deberán cubrir con las defensas o la obra de ingeniería que se elija en la precordillera para lograr encauzar el agua cuando ocurren lluvias torrenciales como sucedió el jueves.