Hace un año, la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia puso en marcha un programa para intentar proteger a niños y adolescentes de acciones que atentan contra sus derechos. Se trata del programa "Niñez en Familia" que incluyó un relevamiento para encontrar menores que cotidianamente desarrollaban estrategias de supervivencia (EdeS) que atentaban contra su integridad. Con este mecanismo se logró detectar a más de 300 menores vendiendo o mendigando en el microcentro sanjuanino durante el 2020. Luego de abordar sus casos y brindarles asistencia, el 15% de ellos reincidió. A través de este trabajo sin precedentes en la provincia se conoció también que la mayoría de los chicos que desarrollaban estas actividades son adolescentes y provenientes de Rawson y Chimbas principalmente.

Este operativo arrancó en febrero del año pasado y se realizó hasta la primera quincena de marzo debido a la cuarentena. Pero retomó la marcha a partir de junio tras la flexibilización que alcanzó a algunas actividades en la provincia, incluida la actividad comercial. Fue entonces que los encargados de hacer el relevamiento pudieron comenzar nuevamente a trabajar a pleno. De esta manera se logró detectar a 330 menores que mendigaban o practicaban la venta ambulante por el microcentro sanjuanino. La Dirección de Niñez abordó todos los casos con las políticas previstas en el nuevo programa, pero a pesar de esta intervención 49 de estos chicos, el 15%, reincidió. Es así que en el 2020 se detectaron 281 nuevos casos de este tipo más 49 reincidencias. Carlos Olivera, director de Niñez, dijo que en primera instancia el operativo consistió en una intervención informativa que consistió en explicarles a los menores y a sus familias los objetivos y alcances del programa "Niñez en Familia" y en advertirles que los chicos no deben continuar con la venta callejera o la mendicidad porque esto vulnera sus derechos. "También se realizó una entrevista a los involucrados y a sus familias por parte del equipo técnico quien se encargó de evaluar las necesidades de cada grupo y brindar contención y asesoramiento. A esto se sumó la entrega de módulos de alimentos y kits escolares a algunos de los entrevistados según su situación. Pero, hubo que buscar más herramientas para intentar evitar la reincidencia", dijo Olivera.

Cualquier ciudadano puede llamar al 102 para alertar sobre un caso de mendicidad infantil.

El funcionario agregó que en esta segunda etapa de abordaje para reincidentes consistió, además explicarles nuevamente a los menores y a sus familias los objetivos y alcances del programa "Niñez en Familia", en realizar un seguimiento de sus casos, trabajar con ellos en el fortalecimiento familiar y capacitar a los adultos para ser emprendedores sociales, en el marco del programa del Ministerio de Desarrollo Humano, para que logren un sustento digno y constante para evitar que los menores sigan practicando estas EdeS.


Otros datos relevados

En cuanto a las edades de los chicos que mendigaban o vendían en el microcentro y relevados durante el 2020, la mayoría era adolescentes de entre 14 y 17, alcanzado un total de 137. Dentro de los 281 casos nuevos (los reincidentes excluidos de este punto de las estadísticas), se registraron 33 casos de chicos de 14 años; 41 de 15 años; 33 de 16; y 30 de 17 años. Además, se detectaron 33 casos de niños de menos de un año de vida y 5 años involucrados en estas actividades (todos estaban acompañados por un adulto). Mientras que también se relevaron 111 casos de chicos de entre 6 y 13 años.

Otro dato que arrojó este primer relevamiento fue el referido a la procedencia de los 330 menores involucrados en la venta ambulante y la mendicidad. De ese total, 98 (30%) era de Rawson; 75 (23%), de Chimbas; y 26 (8%) de Pocito. En tanto que 70 no informaron su lugar de procedencia, y el resto de los menores provenía de Capital, 9 de Julio, Santa Lucía, Caucete, Rivadavia y San Martín, según consta en los registros.

También se discriminó la cantidad de casos nuevos detectados por períodos de meses y según la situación de la pandemia en la provincia. Entre febrero y la primera quincena de marzo se detectaron 37; entre junio y agosto, 51; y entre septiembre y diciembre, 193.

En cuanto a las causas de intervención, de los 330 casos abordados, 204 fueron por venta ambulante de estampitas religiosas, bolsas de residuos o artículos de mercería y representaron el 62% del total. En tanto que 22, correspondieron a mendicidad, alcanzando el 7%. También se registraron 4 casos de trabajo informal (menores trabajando en locales comerciales a cambio de un porcentaje de las ganancias) y otros 100 chicos limpiando parabrisas, cirujeando o atendiendo el negocio familiar.

Durante este primer relevamiento también se evaluó el nivel de escolaridad de los menores involucrados. Se determinó que 6 de ellos no tenían escolarización, mientras que 15 desertaron de la escuela.



Antecedentes

En 2018 la jueza de Paz Letrada de Caucete, Luciana Salvá, intervino judicialmente y prohibió la mendicidad de menores en los márgenes de la Ruta Nacional 20, en el paraje de San Expedito, tras probarse que usaban niños, quienes no asistían cotidianamente a la escuela, para pedir. La magistrada afirmó en su fallo que si los padres de estos más de 20 chicos continuaban con esas actividades lucrativas, se girarán oficios a la Anses, para que no reciban ningún beneficio de ayuda económica.

Detalles del programa

El Programa "Niñez en Familia" perteneciente a la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia, dependiente del Ministerio de Desarrollo Humano, busca establecer acciones de forma permanentes y estables con el fin de garantizar la restitución de los derechos de los niños y adolescentes que desarrollan cotidianamente estrategias de supervivencia como mendicidad y venta ambulante en la vía pública. Este programa se desempeña bajo el marco de la ley 26.0611.

Para detectar y abordar los casos se cuenta por un lado con un equipo de monitores territoriales distribuidos en dos turnos (mañana y tarde) quienes recorren el microcentro sanjuanino. Y por otro lado, está el equipo técnico compuesto por psicólogos y trabajadores sociales quienes desempeñan su trabajo en la residencia del Hogar Paula. El primer equipo se encarga de detectar posibles casos de EdeS y de registrarlos en una planilla con los datos personales y de contacto de los menores involucrados, para luego realizar una intervención informativa sobre el programa en donde se explican sus objetivos y alcances y se advierte que no deben realizar esa actividad ya que se están vulnerando sus derechos. También puede coordinar una entrevista entre los chicos, sus familias y el equipo técnico que se encarga de evaluar las necesidades de cada grupo y brindar contención y asesoramiento según sea el caso.

Después de las entrevistas se encargan de realizar los informes psicosociales y evaluar el seguimiento o la derivación de los casos entrevistados.