Una cronología rápida no puede abarcar todo el amplio y complejo espectro de la realidad, pero puede ayudar a entender por qué un 71% de 14.229 lectores de DIARIO DE CUYO evaluaron la gestión de Alberto Fernández, frente a la pandemia, como "buena y muy buena".

El 11 de marzo la Organización Mundial de la Salud declaró al coronavirus (Covid-19) como pandemia. Luego de un par de semanas de tensión mundial, la institución dependiente de la ONU debió tomar cartas en el asunto debido al rápido nivel de propagación del desconocido virus “originado” –entre varias comillas- en la ciudad china de Wuhan. No pasó ni una semana para el Gobierno argentino –el 15 de marzo- tomara la decisión de suspender las clases en todos los niveles. Cierto es que lo hizo con la presión ciudadana que, horrorizada por la cantidad de casos y muertes en Europa, le exigió a la administración que las suspendiera.

La grave situación sanitaria de Italia, España, y China empujó a que Alberto Fernández hiciera uso del recurso de la Cadena nacional. El mandatario, el 19 de marzo, poco antes de las 00,  interpeló al pueblo argentino con un mensaje cuyo contenido se barajaba desde hacía días: decretó la cuarentena obligatoria. Las condiciones de la sanidad así lo exigían. Fernández optó por el distanciamiento social para disminuir la cantidad de contagios de Covid-19, de manera que los hospitales públicos pudieran contener la demanda.

El presidente, como lo dice en cada entrevista, eligió la salud sobre la economía. La elección acarreará nefastas consecuencias en el plan económico inicial del Gobierno: encender el motor de la economía con el combustible del consumo interno y la renegociación de la deuda externa.

La historia es conocida. Sólo algunas actividades quedaron exceptuadas del confinamiento con fines sanitarios, como los dispensarios de alimentos, las farmacias, todo el sector de la salud, la prensa y las ferreterías, entre otros. Y aunque algunas industrias y comercios se verán beneficiados (los supermercados y las fábricas de respiradores, por ejemplo), la gran mayoría de los trabajadores se vieron y se verán en perjudicados.

Una manera de paliar lo expuesto fue la batería de medidas destinadas a proteger -o en realidad a no desproteger tanto- a la ciudadanía. Eximió del pago de contribuciones patronales a los sectores más afectados por la crisis: cines y teatros y restaurantes, el transporte de pasajeros y los hoteles; prohibió despidos; habilitó una línea de créditos blandos por unos $350.000 millones para garantizar la producción y el abastecimiento de alimentos e insumos básicos; y varios bonos para beneficiarios de planes sociales. Incluso promulgó el Ingreso Familiar de Emergencia: 10.000 pesos para trabajadores informales.

Pero hubo un grave tropiezo, que algunos profesionales consideran un retroceso. El viernes 3 de abril, desde la madrugada, se convocó una inmensa masa de jubilados, pensionados y beneficiarios de AUH y AUE a los bancos del país. Larguísimas filas de hombres y mujeres de tercera edad (grupo de riesgo) frente a las escasas sucursales bancarias habilitadas que esperaron hasta el último minuto para cobrar sus haberes. Muchos lo bautizaron como el viernes negro.

Alberto Fernández debió tomar las riendas ante las malas gestiones de sus funcionarios. Al día siguiente los bancos extendieron los horarios de atención, los beneficios se cobraron por terminación de DNI y los municipios y provincias dispusieron sillas para la espera alejadas entre sí. Una de cal, una de arena, dice la tradición. Siguen habiendo fallas y aciertos. En las últimas horas se conoció que el Ministerio de Desarrollo Social compró alimentos a un precio mayor al que el mismo gobierno regula. Este martes, el responsable fue apartado de su cargo.

“Elegí la vida a la economía”, repite el presidente, y un 45% de los lectores de este diario creen que su gestión ante el coronavirus es muy buena; otro 26% dice que es buena, y sólo un 21% que es regular. Mientras que los que optaron por la negativa, al elegir la opción "mal" de la pregunta “¿Cómo calificás hasta el momento la actuación del presidente Alberto Fernández frente a la pandemia?” son un exiguo 8%, de un total de 14.229 usuarios.